Proverbios y Dichos populares chilenos
Presentación de Proverbios Chilenos
Índice: | A B C D E F G H I J K L M N O P R S T U V Y Z |
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Dichos Populares de Chile
A
- A río revuelto, ganancia de pescadores.
- A rey muerto, rey puesto.
- Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.
- Apreta Cachete
- Al pan pan y al vino vino. Decir las cosas claras.(Moraleja)
- A morir Katanga. Llegar hasta el final de lo que se está haciendo.(ML)
- A buey viejo, pasto tierno.
- Una persona de edad prefiere como pareja a alguien mas joven.
- Arrear mulas a medianoche. Hacer actividades poco honradas.
- Anda con malas pulgas.(estar malhumorado)
- A caballo regalado no se le miran los dientes. (referido a no criticar las cosas cedidas o regaladas)
- A Dios rezando y con el mazo dando.(Pides algo a Dios, pero te vas esforzando por conseguirlo)
- A falta de pan, buenas son las tortas. (Si no hay algo, pueden haber cosas que se asemejan, o incluso mejores)
- A quien madruga, Dios le ayuda.
- A la oportunidad la pintan calva, pero cuando se presenta hay que agarrarla de las mechas.
- Al ojo del amo engorda el caballo.
- Las cosas funcionan bien solo cuando se les controla.
- Andar arrastrando el poncho. Andar de mal ánimo, depresivo.
- Andar de capa caída. Dicho huaso que significa andar sin ánimo.
- Andar con yeguas robadas. Decir mentiras o andar con la mujer de otro
- Andai a patás con los piojos (cuando queda poca plata)
- Andai con la del bandido (cuando anda con malas intenciones)
- Andar metido en la chuchoca. (Andar en problemas).
- Andate pa' los andes. (desligarse del tema de la persona con cual esta dialogando)
- Al agüaite (estar atento a algo)
B
- Bailar con la fea. (Realizar un trabajo desagradable y/o complicado, también significa pasar por una mala situación)
- Buscarle la quinta pata al gato. Buscar siempre el problema. Creer que se tiene la razón (estando equivocado) y tratar por todos los medios de hacer creer que es verdad. Rebuscarse.
- Buscando lo que no se encuentra, se encuentra lo que no se busca..
C
- Cada oveja con su pareja.
- Calabaza,calabaza (cada uno para su casa)
- Cambian los payasos pero el circo sigue.
- Casa de herrero, cuchillo de palo.
- Como Chancho en el barro (alguien que se encuentra a gusto en cierta situación)
- Cazando moscas (Se dice de quien anda despistado)
- Chancho en misa (fuera de lugar).
- Chancho limpio nunca engorda.
- Círculo en el sol, aguacero o temblor.
- Círculo en la luna novedad ninguna.
- Chicotea los caracoles. Que se apresuren en lo que hacen
- Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente.
- Camarón que se duerme, se lo comen los peces.
- Como pecas, pagas.
- Cuando el río suena, es porque piedras trae.
- Cuando sale el Gato... los ratones están de fiesta.
D
- Dale con que las gallinas mean (se refiere al porfiado)
- Dar palos de ciego (estar desubicado o tener comportamiento errático o desesperado)
- Dar perlas a los cerdos.(ML)Regalar tesoros a quien no los apreciará.
- De tal palo tal astilla. dicese de los hijos salen igual al padre en todas sus formas
- De roto a roto y medio. Lo que tu digas ser o seas, yo seré siempre más. Si tu eres choro yo soy más choro
- Dios castiga, pero no a palos. alguien de mal actuar le sucede algo malo
- Donde el Diablo perdió la manta. (Se conoce también como "Donde el diablo perdió el poncho" y se utiliza cuando se quiere decir algo de un lugar lejano.)
- Dale con que los piojos tienen lengua(wn porfiaaoo)
- Del dicho al hecho largo trecho.
- Después de la guerra, todos son generales.
- Donde fuego hubo, cenizas quedan.
- De tal palo, tal astilla.
- Dile al tonto que tiene fuerza y el tonto más fuerza hace.
E
- El que sabe,sabe y el que no sabe... es jefe
- El parche antes de la herida/ponerse el parche antes de la herida (intentar salir airoso de una situación antes de que suceda lo peor)
- El que nace chicharra muere cantando.
- El que quiera celeste que le cueste.
- En el país de los ciegos; el tuerto es Rey. (ML)Sobresalir a costa de los defectos de otros.
- Estar hasta el cuello/la coronilla/la tusa (estar sobrepasado,en una situación límite o extrema,aburrido,cansado)
- El día del nispero. (Cuando algo no sucederá o pasará).
- Esta mal pelado el chancho . / cuando no es justo
- Entre Purei y Los Lagos, (Que está a medio camino o no ha quedado muy bueno)
- Entre Tongoy y los Vilos (por hay...a medio camino, algo indeciso)
- En boca cerrada no entran moscas.
G
- Guagua (bebe) que no llora no mama (referido a exigir lo por derecho propio)
H
- Hasta las maracas dan boleta (GC). Incluso en las circunstancias mas inmorales hay normas.
- Hay una gran diferencia entre ser responsable y hacerse responsable.
- Hoy canta Gardel (día en que las empresas le pagan a sus trabajadores).
I
- Igual que el capitán Araya: embarca a la gente y se queda en la playa.
- Igual que el padre Gatica: predica pero no practica.
- Igual que el señor Zapata: si no gana, empata.
L
- La culpa no la tiene el chancho, sino, quién le da el afrecho.
- La manzana nunca cae lejos del árbol.
- La cabra siempre tira al monte.
M
- Más feo que la mentira.
- Más feo que un peruano
- Más negro que intención de suegra.
- Mendigo que no pide se muere de hambre. Se refiere a que si alguien no verbaliza su necesidad las otras personas no se darán cuenta y no lo ayudarán.
- Más nervioso que perro en columpio
- Más serio que perro en bote
- Más arrugao´ que abuela comiendo limón
- Más nerviosa que monja con atraso.
- Más raro que gallina con dientes.
- Más raro que chino colorín.
- Más fome que bailar con la hermana.
- Más feo que pegarle a la mamá.
- Más cosido que botón de oro (aplica a quien está muy borracho)
- Más perdido que el Teniente Bello (aplica a alguien al que no se puede ubicar)
- Mucho ruido y pocas nueces (algo que se había exagerado)
- Más perdido que poroto en paila marina (fuera de lugar)
- Más enredado que moño de vieja (algo muy complicado)
- Más tira un choro que una yunta de bueyes.
N
- No mezcles moras con manzanas. Cuando un tema no tiene nada que ver con otro tema
- Más entrador que arado de palo (persona arribista)
- No creo en brujos, pero de que los hay, hay (cuando se recibe un golpe de suerte)
O
- Ojo por ojo, diente por diente.
- Ojo piojo.
P
- Pelliscar la uva. Intimar o tener algo con la pareja de otra persona.
- Pedir peras al olmo. Solicitar o esperar algo imposible
- Perro que ladra, no muerde.
R
- Robarle los huevos al águila.(ML) Ser muy arriesgado.
S
- Sacar ciegos a mear (GC).
- Salta pal' lao (No te creo)
- Saltarin bombín (se utiliza para cobrar algo)
- Saltarin se llamaba el profeta y Damián el mentiroso (Cuando hay que pagar algo y el deudor sólo se justifica)
- Se te caen los "churrines"(calzones) (cuando una mujer anda detrás de un hombre)
- Se han visto muertos cargando adobes ( cuando se colocan o hacen cosas raras o fuera de lugar)
- Se lo comen los piojos, (cuando la falta de voluntad impide la superación de la persona)
- Se le sueltan los elasticos de los chiteco ( Se dice de la mujer que queda en estado de shock al ver a un hombre)
- Se le arrancan las cabras pa´l cerro (Se dice de la persona con problemas mentales)
- Se me echó la yegua (lo dice quien se siente cansado o desganado)
- Sacar las castañas con la mano del gato
U
- Un pendejo tira más que una yunta de bueyes
- Un par de tetas tiran mas que dos carretas. (Mas puede el amor por una mujer que la razón).
V
- Vamos arando dijo la mosca sentada arriba de los cachos del buey.
Dichos populares
A
A calzón quitado
Conversar con precisión y franqueza. La frase habría surgido de la antigua costumbre de castigar a los niños en los colegios por una falta muy grave, por la cual debían bajarse los "calzones" para recibir palmetazos o chicotazos en el trasero. Andar con la mona: Es cuando alguien se ha embriagado de tal modo, que ya casi no se sostiene en pie. Cuando se conocieron los simios en España, llamó la atención la forma cómo se desplazaban, con movimientos poco armónicos y vacilantes en apariencia.
A pies juntillas
"A pies juntillas" en el contexto de creer algo con total convencimiento y seguridad. "Creo a pies juntillas que..." Una de las teorías del origen de esta expresión es la de un antiguo juego infantil que los niños practicaban. Consistía en saltar, con los pies juntos y una venda en los ojos, entre cuadros pintados en el suelo, siguiendo las indicaciones de un compañero y confiando en ellas. Una de las derivaciones de este juego es la "Rayuela", consistente en tirar una piedra a una casilla numerada e ir a recogerla alternando saltos con los pies juntos con otros "a la pata coja". También existe el uso "Negar a pie juntillo", es decir, hacer una negación con total convencimiento y seguridad, pero no se emplea tanto como la primera acepción comentada.
A tontas y a locas
Empleamos este modismo para indicar que algo que se hace sin orden ni sentido. Este antiguo uso ya lo encontramos en "El Quijote" en la parte poética preliminar de la novela, en la que Cervantes juega con el doble sentido, al hablar de las doncellas que malgastaban su tiempo con banalidades; por un lado expresa la voluntad de no querer hablar de ellas "sin ton ni son" y por otro las adjetiva, llamándolas "tontas y locas". Este sarcástico empleo de la expresión es recurrente en la historia. El licenciado Juan de Robles en una de sus obras, en el Siglo XVII, también hace referencia a dicho empleo al narrar el encuentro del fraile agustino Fray Juan Farfán con unas monjas, las cuales le pidieron, sin tiempo para su estudio, que diera el sermón en la misa. En el mismo, se excusó de ello diciendo "Al fin, hoy predicaremos a tontas y a locas".
En los años 20 lo encontramos en un relato atribuido a Jacinto Benavente en el que se narra que las organizadoras de un club femenino le pidieron, el mismo día de su visita, que diera un discurso. A tal petición respondió que no le gustaba "improvisar, hablar a tontas y a locas", siendo de nuevo mordaz con el doble significado.
Achaplinarse
Cuando alguien se arrepiente de algo o sencillamente “se le hizo” decimos que se achaplinó. El término viene del escándalo que vivió Charlie Chaplin, quien tuvo un hijo con una amante que nunca reconoció. En esa época el mundo era tan chico, que se podían crear palabras en base a famosos.
Al que quiera celeste, que le cueste
Quien anhela obtener algo muy valioso debe estar dispuesto a afrontar su precio, por alto que éste sea. El dicho y su moraleja guardan estrecha relación con un mineral, el lapislázuli, que se extrae de unos pocos lugares de Oriente. Con él se fabricaba un bellísimo color azul, muy resistente a la acción del tiempo, que por su procedencia fue llamado azul de ultramar. La gran rareza del lapislázuli y el alto costo de su transporte hicieron que su valor fuera comparable al del oro. Cuando los papas y los grandes señores del Renacimiento encargaban un cuadro, se estipulaba por contrato cuánta pintura de oro y cuánto azul de ultramar entrarían en la obra.
Al mezclarse con blanco, ese precioso azul producía el celeste que originó la expresión. Pero existe también otra versión sobre ese origen, vinculada con la acepción religiosa de la palabra celeste, equivalente a celestial. En tal caso, serían los sacrificios realizados en la Tierra el precio de la gloria en el Cielo. Ambas versiones no se contradicen. Y ninguna de las dos deja duda de que cueste y celeste riman con muy justa razón.
Al ojo del amo engorda el ganado
Dicho popular que no habla para nada bien de los trabajadores, en especial de aquellos que tienen relación de dependencia, pues entraña una desconfianza explícita en cuanto a lo que puedan rendir o producir si el patrón no está presente. No obstante, como tantas otras sentencias muy extendidas en la población, nació de las experiencias sumadas por muchas personas que pudieron constatar que los empleados se esfuerzan menos cuando no hay un ojo vigilante. La figura utilizada es la de un ganadero (el amo de la frase) que está siempre atento para cuidar la alimentación de sus reses.
Andar de capa caída
Con esta expresión se busca describir el ánimo decaído de una persona, en particular de quienes han perdido un lugar de prestigio y todos sus beneficios, o simplemente andan tristes. Debe sus orígenes al derecho romano, según el cual Capítis díminutio, apuntando al capital, significaba la pérdida parcial de los derechos, situación a la que se llegaba en general por enfermedad o deudas. La tradición popular la transformó en capa caída, aludiendo a la prenda de abrigo cuyo uso ha perdurado por siglos y que antiguamente revelaba, de manera simbólica, la condición social de las personas. La manera en que los hidalgos llevaban la capa, especialmente los empobrecidos, delataba su estado de ánimo, ya que éstos andaban arrastrándola por el piso cuando habían perdido los favores de la corte, contrayendo deudas de juego o cuando padecían mal de amores.
Anda con la del bandido
Si una persona andaba con malas intenciones, se decía que “anda con la del bandido”. Era una frase así como pintorezca, de persona ingeniosa.
Aunque la mona se vista de seda
Aunque la mona se vista de seda, mona se queda: Habla de la condición natural de las personas que, por más que traten de disfrazar su actitud, no logran despojarse de sus características. La frase está tomada de la fábula XXVII del escritor español Tomás de Iriarte.
A caballo regalado no se le miran los dientes
Significa que hay que mostarse conforme con las cosas obtenidas gratuitamente sin importar su estado. Presenta un remoto origen, pues la costumbre de observar detenidamente la dentadura de un caballo antes de comprarlo, para evaluar su salud o su edad, se remonta a varios siglos en la historia del hombre. Claramente, en la frase se nos advierte que, si el caballo es un obsequio, mal haríamos en fijarnos en el estado de sus dientes, puesto que no hay que pagar precio alguno por él.
A otro perro con ese hueso
La expresión se usa como una forma de desanimar a quien quiere hacernos creer una mentira o bien nos ofrece algo cuya calidad es inferior. Es la forma de invitarlo a que lo intente con otra persona, aludiendo de esta forma a la ingenuidad del perro, que corre detrás de cualquier cosa que se parezca a un hueso, sea una piedra o un hueso de plástico.
Respecto de la versión en inglés -tell that to the marines!, algo así como "andá a contárselo a los "marines"- está basada en la proverbial integridad que caracterizaba a los integrantes de ese Cuerpo de la marina de los EE.UU., célebres por su fama de incorruptibles, particularmente, durante la guerra fría, a partir de los años 50. En esa época, era poco probable que los "marines" aceptaran la imposición de una orden, sobre todo si esta vulneraba su integridad moral. Con el tiempo, y en la misma medida en que decayó la popularidad de los "marines", esa interpretación dejó de ser corriente en los Estados Unidos y entonces comenzó a usarse -con idéntico valor- la expresión I am from Missouri (yo soy de Missouri), en alusión a la característica seriedad y poca credulidad de los habitantes de ese estado. Hoy en día, la locución a otro perro con ese hueso -que bien parece ser propia del Río de la Plata- se usa con idéntico valor.
A la coche guagua
Cuando una persona consigue un beneficio y no se esfuerza en absoluto por lograrlo, incluso aprovechándose de otros, se dice que lo hizo a la coche guagua. Igual que las guaguas que son empujadas en sus coches para todos lados sin mover un dedo. Eso sí, la expresión original era “A lo coche guagua”, pero se deformó quien sabe porqué. Incluso se deformó hasta decirse “A la cochiguagua” y mucha gente pensó que la Cochiguagua era un lugar que quedaba en alguna parte. Logré el ascenso a la cocheguagua.
Andar con la caña
Andar con resaca. Nace en las ramadas chilenas, del 18 y de navidad (antes se hacían ramadas para noche buena) donde vendían el vino por la medida del vaso o caña. Era media caña o caña entera, por lo tanto la gente empezó a asociar a andar con la caña a aquellos que se habían tomado la caña entera.
Atorrante
Ser un vago, alguien que vive al día y sin trabajar. Existen dos versiones del nacimiento del termino. La primera nos dice que cuando se construyeron las primeras cloacas modernas en Buenos Aires, a fines del siglo XIX, se usaron enormes caños cuyo fabricante era un tal "A. Torrant". Estos tubos eran el refugio de los mendigos para dormir, pero como llevaban por fuera la marca A.Torrant, la gente comenzó a llamar a estos indiguentes atorrantes.
La otra nos dice que su origen viene de la época de la esclavitud, en lo que hoy es el Río de la Plata, cuando se ponía a los esclavos a tostar las semillas del café, acción que también se conoce como "torrar". Cuando se encontraba a los esclavos descansando en horas en que debían estar tostando el café, se decía que estaban "atorrando". De ahí que se designase dicha palabra para referirse a alguien que no trabaja o no cumple con sus obligaciones o se despreocupa del prójimo.
A Chile el termino llego a través de argentinos que cruzaban a Chile y sobre todo a través de los tangos, como el de Ignacio Corsini, llamado atorrante y el de Francisco Canaro del año 1929 también llamado atorrante.
Aburrirse como una ostra
Empleamos este modismo para denotar un aburrimiento extremo, según indica la RAE. Por ejemplo: "Todos mis amigos se han ido de vacaciones y con mis padres me aburro como una ostra".
Lo primero que tendemos a pensar al oír esta expresión es en el molusco, sin embargo en este caso "ostra" se refiere a ostracismo, o "apartamiento de cualquier responsabilidad política o social". Dicha palabra viene del término griego ὀστρακισμός (ostrakismós). El ostracismo practicado en la antigua Grecia, era el destierro de aquellos miembros de la sociedad que se consideraban perniciosos. El sistema para definir quiénes eran los penados se organizaba mediante una votación por mayoría entre los miembros de la asamblea (ekklesia), en la que escribían en desechos de cerámica (llamados "ostracones") el nombre de la persona a la que querían desterrar. Los "elegidos" disponían de 10 días para dejar la ciudad y la duración del destierro era de 10 años, sin embargo la pena solía ser rebajada.
Durante el transcurso de estos "ostracismos" la falta del trato con semejantes daba como resultado, entre otras cosas, un tremendo hastío que llevaba al aburrimiento; esa característica es la que se ha adoptado para que con los siglos se acuñe la expresión tal y como la conocemos actualmente.
Al tun tun
Empleamos este uso para decir de algo que se hace al achunte, al boleo, sin sentido. Se cree que el origen proviene de un libro recopilatorio de salmos que salió a la luz a principios del Siglo XVII transcrito al latín por George Buchanan, el cual tradujo el salmo 27 de la Biblia, donde en un verso se dice la frase "Te mens anhelat, vultus ad vultum tuum..." (La mente que anhela mirándote a la cara...). Estos salmos en latín se leían antiguamente en las iglesias durante la celebración de las misas, el pueblo llano (como en muchas otras locuciones) usaba lo que oía a su conveniencia dándole significado propio, aunque no tuviera que ver nada con el original, en este caso extrajeron la parte "Ad vultum tuum" para conseguir tal inverosímil sentencia que de esa manera les sonaba. Otra teoría es la del uso que se cree se hacía en la antigua Roma de dicha expresión en su modo vulgar, viniendo a significar "A bulto".
Armado hasta los dientes
Una persona que tiene muchas armas para combatir. Se remonta a los antiguos piratas quienes llevaban cuchillos en los dientes cuando abordaban las naves enemigas para tener las manos libres.
B
Botica
Significa Farmacia. Claro que estamos hablando de la época en que habían farmacias de barrio, donde la persona que te atendía todos la conocían y no existía la colusión. Había una botica por barrio, y no una botica en cada esquina.
Bailar con la fea
Significa que alguien debió soportar estoicamente un contratiempo o tolerar una situación desagradable. Esta frase comenzó a gestarse en las fiestas del pasado, cuando las mujeres esperaban sentadas a que las invitaran a bailar e iban saliendo a la pista en orden descendiente de belleza y simpatía. Antes, la caballerosidad no permitía que una mujer se quedara sin bailar, aunque fuera fea.
Bacán
Quizás uno de los chilenismos más utilizados y popular después del huevón. Se usa para referirse a algo extraordinario o muy agradable. La Palabra que comenzaron a utilizar los inmigrantes italianos, de Génova en Argentina, cuando españolizaban palabras italianas a españolas, a este tipo de lenguaje se le llamaba Lufardo, que es españolizar palabras italianas. Esta palabra Baccán y este de Baco (bastón), la empleaban para referirse a una persona elegante que llevaba bastón, pero también Patrón, Capitán de Barco y padre de familia. Chile la adoptó de los Tangos argentinos de 1952 que llegaban, hoy se usa para expresar algo entretenido, bueno, positivo, etc.
Buscarle la quinta pata al gato
Cuando se tienen reparos sobre la conducta o los dichos de terceros se utiliza esta frase, cuya forma correcta según algunos sería “buscarle tres pies al gato”. Los diccionarios no se ponen de acuerdo. El de María Moliner, por ejemplo, prefiere esta última versión y la define como: “buscarle complicaciones a un asunto que de por sí no las tiene”. La mayoría de la gente al citar el dicho menciona tanto al micifuz al que le falta una extremidad como al que le sobra.
Para ellos el sentido es idéntico. Y todavía están los que hacen distingo acerca de la aplicación del tres o del cinco. Los que la emplean en la primera forma sostienen que se refiere a lo fácil que resulta criticar: frente a cualquier minino, sea persa o atorrante, hasta el más torpe encuentra los tres pies requeridos. En cuanto a lo de la quinta en no querer aceptar, por mala fe o ignorancia, la realidad tal cual ES. Una cuarteta anónima resume muy bien este dilema trivial: “El normal cuatro presenta, tres si le falta una sola, y cinco si quien las cuenta toma por pata la cola” una solución salomónica, como se ve.
Brillar por su ausencia
En los funerales Romanos se solía exhibir las efigies de los antepasados como señal del linaje. Durante la honra fúnebre a Junia -la cual era familiar de dos de los conspiradores que asesinaron a César: Casio y Bruto- las efigies de éstos dos asesinos no estaban presentes haciendo gala por su ausencia, algo que los concurrentes notarían rápidamente y sería el tema reinante entre los murmuros y chimentos del funeral. Utilizando esto como referencia en uno de sus trabajos, el poeta André de Chenier pondría esta frase de moda mas de mil años y unos cuantos siglos después.
C
Cabros / cabras
Este término es utilizado para referirse a hombres y mujeres jovenes. También es usado por estos para hablar de su grupo de amigos: “Me juntaré con los cabros”. Dicen algunos que esto es porque antiguamente “cabra” era un carruaje tirado por un solo caballo. Normalmente en ellos viajaban muchachas de alcurnia, por lo que la palabra paso a usarse para referirse a estas mujeres.
Cachai
Es otro término que ya es parte de nuestro uso diario y que se refiere a comprender algo. También puede ser usado en remplazo del verbo imaginar: “¡Te cachai que tuviera ese auto!”. Su origen viene del inglés “to catch” que exactamente se refiere a atrapar, pero es usada para referirse a entender o comprender algo.
Cada muerte de obispo
Se recurre a esta expresión cuando queremos señalar que algo sucede muy de vez en cuando, con intervalos por demás prolongados. La expresión incluye a un obispo indeterminado, pero se presume que se alude al Papa, quien no abandona su cargo hasta su muerte. Pero no todos los Papas han gozado de un largo período al frente de la Iglesia Católica. El caso más recordado es el de Juan Pablo I (1912-1978), fallecido en extrañas circunstancias, luego de 33 días de haber sido consagrado Sumo Pontífice.
Cargar el muerto a alguien
Empleamos este modismo cuando queremos desviar la culpa de un hecho a otra persona que es ajena a él y por lo tanto inocente. Por ejemplo: "Juan evitó la sanción económica ocultando sus fallos en la contabilidad y echándole el muerto a Pedro"
Parece ser que su origen proviene de las antiguas leyes jurídicas medievales, según las cuales, cuando en una localidad aparecía el cadáver de una persona con evidencias de haber sido asesinada y no se podía determinar el autor del crimen, los habitantes de dicha zona estaban obligados a pagar conjuntamente una sanción conocida por el nombre de "homicisium".
Con el objeto de evitar el pago de esa multa, los lugareños, cuando encontraban tal situación y antes de que las autoridades lo descubrieran, solían ocultar el cuerpo y transportarlo sigilosamente a las inmediaciones de una localidad colindante, haciendo por lo tanto, que el coste recayera en sus vecinos. El hecho en sí de la responsabilidad de su transporte dio origen a otro uso: "Cargar con el muerto", actualmente conocida. El empleo de la expresión "echar el muerto a otro" se acuñó por este conjunto de actos y ha llegado hasta nuestros días con el significado ya conocido.
Cortar las huinchas
El dicho se usa cuando se está en una situación de mucha ansiedad por hacer algo. Por ejemplo, alguien que está en ayuno y tiene muchas ganas de comer podría decir: “Estoy que corto las huinchas por un plato de comida”. El origen de la expresión viene de la hípica. Antes de que existieran los partidores automáticos en los hipódromos, se utilizaba una cinta elástica para retener a los caballos antes de que largaran la carrera. La palabra es de origen quechua y se refiere precisamente a una cinta para sujetar caballos.
Cahuín
Todos hemos dicho un cahuín alguna vez. Hemos contado chismes o relatos sobre otras personas y muchas veces agregamos mentiras o exageraciones. La palabra es de origen mapuche, y hacía referencia a una reunión de los caciques o loncos, en la que se conversaba de la situación de cada familia. Esto servía para saber las últimas cosas que hacía cada familia. Pueblo chico, infierno grande, dicen.
Como Pedro por su casa
Dícese de la persona que se mueve con desenvoltura en un lugar que no le es propio. En ocasiones tiene un significado peyorativo para referirse a un intruso cuya actitud es impertinente, arrogante y excesiva. También se usa cuando alguien tiene mucha confianza y se comporta con toda naturalidad, saltándose a veces la prudencia que se supone. Se desconoce quien era el tal Pedro al que alude el dicho, aunque algunos autores lo sitúan en Aragón donde existe una versión que dice: “Entrase como Pedro por Huesca”, que alude a Pedro I de Aragón (1070-1104), que en 1095 reanudó el sitio impuesto a Huesca por Sancho, encontrando muy poca resistencia para tomar la ciudad.
Como chaleco de mono
Está expresión encuentra su origen en la vestimenta que caracterizaba a los monitos que posaban sobre las espaldas de los organilleros que recorrían las calles de los barrios populares. Estos monitos, por lo general, usaban una pollerita y un chaleco viejo, raído y desastroso. A partir de esa identificación se comenzó a usar el “chaleco de mono” como término peyorativo.
En Chile en 1840 llego un circo a Santiago que traía un mono, que vestía con un chaleco desarmado y andrajoso, por lo que la gente lo empezó a asociar de inmediato, cuando querían decir que algo había quedado "estropeado", o que "algo le hacía pasar una vergüenza". Lo increíble que este monito se llamaba "pinganilla", de donde salio el termino chileno para denominar o designar a las personas que son de una clase social baja, pero que fingen ser muy elegantes. Léase: Historia del Circo Chileno
Corría como contratado, o re-contratado
Esta expresión si que no tengo la más mínima idea de donde viene. Cuando un tipo corría muy rápido, se decía que “corría como contratado”.
Caído del catre
Así se le llama despectivamente al torpe. La frase se originó por observación, pues es habitual que los niños más inquietos se caigan de la cama mientras duermen. Antes a aquellos más lentos para reaccionar, se les decía que, de lo mucho que se habían caído del catre, habían quedado con daño cerebral.
Condoro
¿Quién no se ha mandado uno de estos? Condoro es una palabra utilizada para referirse a un error o a realizar algo que desemboca en consecuencias negativas. Hay dos teorías respecto al nacimiento de este término. Una dice que nació debido al episodio del “maracanazo”. Chile jugaba contra Brasil en rio de janeiro, y necesitaba una victoria para poder llegar al mundial. Como la selección nacional iba perdiendo y aprovechando el humo de una bengala que cayó a la cancha, el arquero chileno Roberto “Cóndor” Rojas, se cortó a sí mismo en la cara. El plan era que suspendieran el partido y se jugara en cancha neutral, así podían tener más chances de ganar. Sin embargo, se descubrió el hecho, Rojas admitió haberse auto infligido la herida y le prohibieron volver a jugar en el fútbol profesional. Además Chile fue vetado para asistir al mundial de Italia '90 y de EE.UU. '94 (¡"genios"!). La otra teoría tiene que ver con el mítico personaje Condorito. Los reos en las cárceles tenían la costumbre de llevarse una de estas tiras cómicas al baño, por lo que era frecuente que dijeran “voy por un condorito”, todos sabemos a qué se referían realmente.
Coscacho
Coscacho es como una cosa intermedia entre una cachetada y un combo. Nace debido a un gorro que ocupaba el Ejército de Chile llamado "coscacho". Era un gorro pequeño y puntiagudo usado por los soldados reclutas, cuando estos cometían errores o faltas, el sargento, cabo o superior, podía golpearlos a la altura del "coscacho" (cabeza).
Colero:
Se llamaba así a los ayudantes de maquinistas, porque estos siempre viajaban a la cola del convoy o tren. Un mal colero atraía accidentes, uno bueno en cambio generaba la confianza del maquinista. Esta palabra efectivamente existe según la R.A.E. y designa a un ayudante de capataz de las labores. En la zona en cambio, obtuvo un significado semejante al de colista, haciendo referencia a estar en último lugar.
Cursi
Empleamos este término para definir a algo o alguien que pretende ser fino y elegante sin serlo o hace uso de los sentimientos de una manera ridícula y o de mal gusto. Por ejemplo: "Ana puso a su perra un vestido rosa con encaje. ¡Qué cursi!"
El origen de la palabra es realmente incierto, pero como siempre existen teorías, que aunque no están demostradas, sí son muy extendidas. José María Sbarbi, un sacerdote y filólogo gaditano, publicó en 1873 un recopilatorio de refranes en el que aventuraba a decir que el término procedía de la existencia de una familia francesa llamada "Sicur" y asentada en Cádiz. Debido a su forma en el vestir, pretenciosa y ridícula, se empezó a hablar de ellos empleando la metátesis "Cursi" (cambiando el orden de las sílabas) para evitar que se enteraran de que se referían a ellos. Este término se asoció rápidamente con tal significado traspasando fronteras. De cualquier forma, no se tiene constancia ni registros de tal familia en la capital gaditana.
Posteriormente se realizaron en España sainetes haciendo alusión a unas hermanas venidas de París, las "Tesicur", características por su ridículo proceder y vestimentas en sus apariciones sociales. En dichas obras se realizan juegos de palabras hasta llegar a la palabra "cursi" para referirse a ellas.
Otra teoría etimológica, procede del termino "silla" que en árabe es "kursi", el cual fue empleado con posterioridad como "trono" y con el tiempo y por analogía, a una persona de renombre, que a ojos de la plebe, vestía, actuaba y se comportaba de forma forzada y antinatural, dando el significado final conocido.
Culero
Se refería a los trapos usados que el trabajador ponía en sus posaderas ya fuese para sentarse a comer o descansar. Según la R.A.E. el termino hoy denota a una persona miedosa, sin embargo, mas relacionado con el significado antiguo, se designa así a la persona que transporta drogas en envases introducidos por el ano.
Curiche
En la época de la esclavitud, las mujeres negras de Chile, encontraron una forma de liberar a sus hijos del destino, llevándolos a las comunidades mapuche y entregando a sus hijos en manos de las lagmien. Muchas veces éstos fueron la mano derecha de la machi, de donde también surge la imagen del "Curiche”. Cuando se quería ofender a alguien por el color oscuro de su piel se lo llamaba "negro curiche". Justamente la palabra "curiche" es definida como un modismo coloquial de Chile para nombrar a una "persona que tiene la piel oscura". La palabra, también usada en Bolvia (significado: lodozal), proviene del mapudungún kurü ("negro") y che ("persona").
Charrasqueado
Se dice charrasqueado en Chile, cuando se agarra la "guitarra e´ palo" y se toca con fuerza, pasión, rapidez y a alto volumen. Ahora si son corrios mexicanos, mejor. La palabra viene de un corrido popular mexicano de 1943, y que llegó a Chile en la voz de Jorge Negrete, haya por el 1944. Chile y México siempre han estado unidos, a través de su folclore, pasión de muchos, sobre todo en el campo chileno.
Chiflón
Corresponde a la bajada por planos inclinados, hacia el interior de la mina. Él termino Chiflón también proviene del sonido silbante que producía el viento cuando se colaba por las galerías inclinadas.
Chiporro
A los obreros recién contratados y con solo unos pocos meses de trabajo se les llamaba chiporro. Era una alusión a los corderos menores de entre 3 y 5 años. Con el transcurso de los años el termino quedó en el lenguaje popular usado a forma de apodo en los mas novatos.
Choca
Así se le llamaba al agua azucarada que el minero bajaba a la mina en su charra. También se empleaba el termino para designar a la merienda. En medio del duro trabajo, tomar la choca se consideraba como el alimento necesario para recomponer las fuerzas. El termino choca hoy se emplea a nivel país y se refiere a la comida principal entre el almuerzo y la cena, es decir, la hora de la once.
Choco
Correspondía a un trozo de madera de eucalipto. Actualmente esta palabra se utiliza en la zona, manteniendo su significado original, aplicado por ejemplo, a los rollizos de madera.
Ch
Chancho en piedra
En este caso se habría producido una alteración con la palabra chancho. En sus orígenes en la ciudad de Talca, la expresión habría sido "chanco" en piedra, en atención a que el tomate que se emplea en su preparación... se "chanca" o tritura junto a los otros ingredientes, como la cebolla y los aliños, en una piedra tallada para este efecto.
Cachilupi
Si hay una expresión que ha pasado por muchas formas es la de decir que esto “me gusta“. Hoy decimos que algo es bacán, pero hace mil años decían que las cosas eran cachilupi. O más bien, super cachilupi. Quien usaba harto esta palabra era el Perro Lenteja de Patio Plum. Si conocen este programa, por favor pasen a retirar su carnet al -1 de mi edificio. El malón estuvo super cachilupi!
Chomba
Chaleco. O sweater o chaleca, este es más antiguo que decirle chaleco. Otros como el Montgomery, en Chile es conocido debido a su popularización en la Segunda Guerra Mundial por el mariscal Montgomery. El paletó (del francés paletot) significa una especie de levita, por lo común algo más larga y más holgada que las comunes que suele llevarse sobre el frac, levita, etc. El nombre paletó dicen unos que es de origen español derivado del latín palla, especie de capa o sobretodo y de toc, que en bretón significa capilla o capucho que en un principio iba unido a él. Otros creen que se deriva de un vestido o traje militar que se usó en la edad media.Un día fue el traje de los lacayos y también de los marinos hasta que suprimido el capucho y reformado algún tanto, paró en ser traje de moda, una especie de levita.
Choriflai
Palabra prima de cachilupi. Dícese de algo bueno, bonito o novedoso. Es más nueva que cachilupi, pero aún así es super vieja. El carrete estuvo super choriflai!
Chupamedias
Se trata de una hipérbole, pues chupar las medias sería llevar a la máxima expresión un antiguo rito de admiración y reverencia que consistía en besar los pies de una persona o imagen. Ya los romanos acudían a esta acción para honrar a sus dioses, besando los pies de las estatuas que representaban a sus deidades. La práctica no se detuvo en la antigüedad, pues consta que los caballeros medievales también la ejecutaron para rendir tributo a los señores o monarcas. Hasta hay pueblos, no influenciados por la cultura occidental, que en la actualidad apelan a besar los pies de alguien como signo de veneración o respeto.
Chusma
La chusma eran los prisioneros condenados a apalear sardinas (a remar) en galeras y por tanto encargados de la tareas más ingratas. En Chile la pañabra no era conocida, fue introducida por Roberto Goméz Bolaños a través de su serie infantil "El Chavo del 8" en 1976 por TVN.
D
Dar huaraca
Vocablo de origen quechua que significa honda, aunque el español le llama así a la lienza con que se envuelve el trompo para hacerlo bailar. Dar "huaraca" puede aludir a vapulear a una persona. La frase nació en las competencias de juegos tradicionales chilenos, cuando les correspondía competir a los expertos en hacer bailar el trompo. Los asistentes gritaban: ¡dale huaraca!.
Dar en el clavo
En la Antigüedad, existía un juego infantil llamado "hito", que consistía en fijar un vástago o un gran clavo a cierta distancia de los participantes quienes, desde su lugar, arrojaban unos tejos anillados de hierro, de manera que el éxito en el juego lo lograban quienes conseguían acertar con el aro en el hito. Y como el hito solía ser de hierro -por lo general, se trataba de un clavo- la expresión dar en el clavo vino a significar lo mismo. Con el tiempo y como sucedió con casi todos los dichos populares, la gente comenzó a utilizarlo con otro sentido, en este caso, como equivalente de acertar en la solución de alguna cosa complicada y difícil.
Dar la matraca
La matraca es un instrumento de madera construido con una o dos mazas que forman una especie de aspas, y que cuando se hace girar produce un sonido que resulta bastante molesto. Se utilizaba en algunos conventos para llamar a maitines, y en muchos lugares se emplea aún en Semana Santa para anunciar los actos religiosos del Jueves y el Viernes Santo, e incluso del Sábado de Gloria, ya que estos días no está permitido hacer repicar las campanas por conmemorarse la muerte de Jesucristo.
"Dar la matraca" es una expresión sinónimo de dar la lata o dar la tabarra y se usa para indicar que alguien se pone excesivamente pesado, es importunado o insiste con impertinencia en algo que nos hace enfadar. También se usa como sinónimo el verbo "matraquear".
Dar jugo
Modismo que significa decir necedades e incoherencias, dar la lata. Su origen se asocia a la actitud del borracho, que cuando toma en exceso empieza a decir incongruencias; comparándolo con la fruta demasiado madura que cuando está a punto de pudrirse suelta una especie de jugo.
Darse vuelta la chaqueta
Es una expresión que se utiliza cuando cambia de opinión radicalmente y de forma muy oportunista. El dicho como tal apareció durante la Guerra Civil de 1891, los partidarios del presidente José Manuel Balmaceda que eran derrotados se cambiaban de bando, es decir se ponían la chaqueta y el uniforme de los que antes eran sus enemigos.
Darle vuelo a la hilacha
Esta frase la usaban nuestras abuelas para decir que alguien andaba en malos pasos. La palabra “hilacha” literalmente significa “pedazo de hilo que se desprende de la tela”. La RAE también lo señala como “residuo o vestigio”. Así, darle vuelo a la hilacha significa cometer actos que terminarán por destruir o desgastar el tejido sin medir las consecuencias. Un equivalente más actual sería “irse como hilo de media”.
De punta en blanco
En los ejercicios para combate, los caballeros medievales empleaban armas de hierro ordinario que carecían de filo y llevaban en la punta un botón, como los floretes con que se aprende esgrima. Recibían el nombre de armas negras, en oposición a las que se usaban en los torneos, que eran de acero filoso y tenían el extremo afilado o, como se decía entonces, la punta en blanco. En esas lizas, los contendientes se presentaban ante el árbitro o maestro de armas acompañados de sus escuderos, quienes portaban los yelmos con sus penachos y los respectivos escudos. La gran pompa de esta ceremonia con música de fanfarrias y el espectáculo de las armaduras relucientes y los estandartes al viento quedaron asociados a la frase “estar de punta en blanco”, que tomó el sentido de mostrarse con las mejores galas. Pasaron los tiempos feudales, pero el dicho subsiste. Sólo que ahora se aplica a cualquiera que luce impecablemente desde el peinado hasta los pies. Vestido de punta en blanco. Como para un torneo… de elegancia.
Del año de la Cocoa
Cuando algo es muy antiguo, decimos en Chile que es "del año de la cocoa". Según el historiador Eugenio Pereira Salas (1904-1979) el año de la cocoa sería 1866, año en que la empresa Weir Scott importó a Chile la famosa Cocoa Raff Peptonizada. La leche peptonizada o con pepsina,quiere decir que la leche se ha mejorado para una mejor digestión a través de la trasformación de las proteínas, al agregarse pepsina. Esta es una enzima elaborada por el estómago que descompone las proteínas de los alimentos durante la digestión. El ácido del estómago cambia una proteína que se llama pepsinógeno y la transforma en pepsina.
Dormir como un tronco
Se orienta a tipificar los casos en que una persona ha caído en un sueño tan profundo que se lo puede equiparar con los troncos, en especial con aquellos que se encuentran tirados en el suelo. La fórmula oral recrea la imagen de algo pesado, que se sitúa en posición horizontal y que permanece en una misma pose durante mucho tiempo, sin nada que pueda alterarlo. Además, vale agregar que a los grandes maderos que atraviesan las vías férreas se los llama, precisamente, durmientes.
Dar la lata
Molestar y fastidiar al prójimo con cosas inoportunas. Aunque se cree que proviene de los antiguos dichos españoles “dar la tabarra” o “dar la murga”, son muchas las versiones que circulan sobre su procedencia. Hay quien opina que se refiere al fastidio ocasionado por aquel que golpea instrumentos de percusión como zambombas, palos y cencerros para festejar las segundas nupcias de una viuda o un viudo. Es posible también que al aparecer en el mercado la hoja de lata (luego hojalata) como producto de uso común, los recipientes vacíos de ese material se incorporasen como equipo “sonoro” de las “cencerradas”. De manera que la expresión “dar la lata”, o sea percutir sobre ella, no hizo más que extender el concepto tradicional de “dar la murga”. También está documentado que esta frase podría provenir de la ciudad de Málaga, en cuya cárcel los presos solían comprar una lata de mosto condimentado con sobras de vino, licores y aguardientes que provocaba en los detenidos una intensa borrachera y en consecuencia un deseo incontenible de hablar. Para el profesor Fernando Lázaro Carreter, miembro de la Real Academia Española, este dicho tiene una génesis más castrense. Explica que su origen puede estar en la expresión: “daban la lata los soldados viejos que, en el siglo XVII, andaban de despacho en despacho mendigando compensaciones a sus cicatrices y a las proezas que certificaba aquel rollo de documentos metidos en un tubo de lata”, señalando que de esta costumbre militar pudo surgir “la equivalencia, hoy perfecta, de latazo y rollo”.
Despedirse a la francesa”
Cuando alguien se marcha de un lugar sin despedirse de los presentes. Su origen viene de una costumbre que se popularizó en el siglo XVIII entre la alta sociedad y burguesía francesa. La llamaron “sans adieu” (“sin adiós”) y consistía en retirarse de un lugar sin despedirse, ni saludar a los anfitriones, siendo de muy mala educación hacerlo o indicar siquiera el deseo de marcharse. Con el tiempo, todo volvió a la normalidad y el uso del saludo para despedirse volvió a ponerse de moda, viéndose entonces con malos ojos y falta de educación el irse de un lugar sin decir nada. A partir de entonces en el lenguaje coloquial español se comenzó a aplicar la expresión “despedirse a la francesa” como reprobación al comportamiento de alguien que, sin despedida ni saludo alguno, se retiraba de una reunión. Resulta cuando menos contradictorio que los franceses utilicen la expresión “filer à l’anglaise” (“marcharse a la inglesa”) para referirse a los que huyen o escapan de un lugar. Todo hace suponer que las continuas enemistades históricas entre franceses e ingleses fueron origen y causa de su uso de un modo despectivo.
Dormirse en los laureles
Referente a alguien que se ha relajado, descuidado, ha dejado de hacer algo que debería hacer o lo está haciendo pero con desgana y poca eficiencia. Para conocer la procedencia de esta expresión tenemos que remontarnos a la época del Imperio Romano o incluso antes. Antiguamente, a los poetas, emperadores y generales victoriosos (incluso aquellos gladiadores que se ganaban la libertad en la arena o los atletas triunfadores en los juegos) se les coronaba con guirnaldas confeccionadas con hojas de laurel. Después de haber conseguido el triunfo y el reconocimiento general, esa persona dejaba de trabajar y esforzarse y se dedicaba a “vivir de las rentas”, diciéndose entonces que se “dormía en los laureles” (de su corona).
Dormir a pierna suelta
Empleamos este modismo para definir los momentos en los que hemos dormido plácidamente, sin interrupciones ni preocupaciones y de forma reparadora. Por ejemplo: "¡Qué cansancio tras la carrera!, esta noche dormiré a pierna suelta."
El origen de este uso nos lleva a diferentes épocas en las que los reos, esclavos o presos eran encadenados mediante grilletes en los tobillos, siendo estos fijados al suelo o unidos a pesadas bolas de hierro para evitar que escaparan. Estos sistemas eran especialmente empleados cuando dormían, al terminar los trabajos físicos que les encomendaban normalmente durante el día. De forma excepcional, como recompensa cuando esos trabajos eran bien ejecutados, los guardas les liberaban de sus cadenas para que pudieran dormir de una forma más cómoda. De ese acto proviene la expresión que nos ocupa y con el significado conocido actualmente ha llegado a nuestros días.
Dormir la mona
Utilizamos este modismo para aludir al acto de dormir tras una borrachera hasta que se pase. De hecho, la RAE, en una de sus acepciones, define "mona" como embriaguez o también como persona ebria. Por ejemplo: "Marta estuvo bebiendo desde mediodía y por la noche se fue pronto a dormir la mona".
Existen diferentes teorías del origen de este dicho, pero todas tienen como denominador común la relación entre los simios y el alcohol. La primera nos lleva a las postrimerías del Siglo XVI (algunos hablan del Siglo XVIII), donde como forma de diversión, los marinos que transportaban monos desde África les hacían beber vino o ron para así ver sus reacciones. Misma finalidad tenía la hipótesis que habla de que ésto se realizaba en fiestas populares. Otra teoría nos lleva al mundo circense de la época, en la que para que los primates se quedaran quietos por la noche, les hacían ingerir diferentes bebidas alcohólicas. El hecho de llamar "mona" a la borrachera en sí misma puede venir de los andares de los simios, semejantes a los de las personas ebrias. Con el tiempo, la relación entre emplear el término "mona" como "borrachera" y los actos de embriagarles, dio como resultado la expresión tal y como la conocemos hoy en día.
E
Engrupir
Palabra usada para describir un engaño. Hacer creer a alguien por medio de palabras o acciones lo que no es verdad. Es una palabra adoptada por los chilenos de Argentina, usada en los tangos de como el de 1952 “Hacelo por la vieja” en la voz de Oscar Larroca y la Orquesta de Alfredo de Angelis.[1]. Hoy en Chile es una palabra usada para describir un engaño. Hacer creer a alguien por medio de palabras o acciones lo que no es verdad.
El talón de Aquiles
Aquiles, el héroe de la Ilíada, no podía ser herido más que en una parte de su cuerpo: el talón. Cuando era niño, según la leyenda, su madre Thetis lo sumergió en el Estigia, uno de los ríos que circundan el infierno. Quien se bañaba en él se volvía invulnerable. Pero el talón del que la madre lo sostenía no fue mojado por las aguas mágicas. Por eso murió en el sitio de Trova: una flecha envenenada le dio justamente en el talón. La frase alude hoy a los aspectos más débiles y más expuestos de un individuo. Si sucumbe con facilidad a los flechazos del halago o de una tentación determinada, decimos que esas “zonas erróneas” son su talón de Aquiles.
Estar arriba de la pelota
Andar borracho o drogado, pero no al extremo de perder el sentido. Caminar vacilante, el cuerpo se balancea de un lado a otro. No se coordinan bien las ideas, pero se derrocha euforia. Se le dice a alguien porque se mueve de manera parecida a como lo hacen quienes realizan piruetas en los circos sobre esferas de gran tamaño.
Estar que corta las huinchas
Es cuando alguien tiene muchísimos deseos de hacer algo. La historia está ligada a la hípica y recordaría los tiempos en que los hipódromos no contaban con partidores automáticos. Los jinetes esperaban la orden de partida detrás de una huincha, ante la inquietud de los caballos. Al momento de la largada, la huincha se soltaba.
Echar un polvo
Empleamos esta expresión bien conocida para indicar de forma coloquial la acción de la cópula. Existen varias teorías para conocer el origen de tal expresión. Uno de ellos poco tiene que ver con el acto en si, pero mucho influyó el humor transgresor de la gente de la época para convertirlo en tal. Hablamos de la liturgia católica, donde extraído de la Biblia en el libro Genesis 3, 19 podemos encontrar la frase en latín "Pulvis es, et in pulverem reverteris" o lo que es lo mismo "Polvo eres y en polvo te convertirás". Tras la frase, el pueblo utilizó silogismos "si somos polvo, entonces venimos del polvo, ergo polvo = cópula" con lo que ya estaba la comparación cómica conseguida.
Otro de los orígenes proviene del consumo del tabaco en polvo (conocido como rapé) por la jet set de los años 20. No estaba bien visto inhalar ante señoras tal sustancia, con lo cual, los hombres de la época empleando el uso "voy a echar un polvo" se retiraban a un sitio privado para aspirar dicho producto. Muchas de estas ausencias se aprovechaban para encuentros sexuales. La expresión consiguió su doble sentido. La palabra rapé, decir que viene del francés "râpé" y significa "rallado".
Estás picao´
Como era de esperar, la palabra picado proviene del pico, la herramienta con la que el barretero desprendía el mineral o la tosca de la veta. Pues bien, cuando un trabajador no alcanzaba a terminar su tarea dentro de las horas de trabajo solía acuñar el dicho; me piqué o estoy picado.
Esta es una de las tantas palabras que han logrado mantenerse a pesar del paso de los años, hoy en día, los chilenos utilizamos aquellos dichos que nacieron en las antiguas ciudades carboníferas.
Es Jauja
Se suele usar este dicho cuando nos encontramos ante una situación de satisfacción que no parece tener fin o en algún lugar placentero sin ninguna preocupación. Jauja es una ciudad peruana fundada por el conquistador Francisco Pizarro cuya fama se debe a las excelentes minas que en época de los conquistadores les proporcionó una vida ociosa y regalada. Fue la primera capital de Nueva Castilla y estaba situada en un entorno idílico, famoso por su belleza. Se exageraban las virtudes de la región y sus mujeres (que realmente eran feisimas) para hacer más atrayente a los marinos la larga travesía que les esperaba. Tanto es así que se desvirtuó hasta hacerla parecer el paraíso. De ahí a la frase “esto es jauja” tan solo hubo un paso.
El chivo expiatorio
La expresión “ser el chivo expiatorio” adquirió entre nosotros el valor de hacer caer una culpa colectiva sobre alguien en particular, aún cuando no siempre éste haya sido el responsable de tal falta. Este dicho proviene de una práctica ritual de los antiguos judíos. El Gran Sacerdote, purificado y vestido de blanco para la celebración del Día de la Expiación (purificación de las culpas por medio de un sacrificio) elegía dos machos cabríos, echaba a suerte el sacrificio de uno en nombre del pueblo de Israel y ponía las manos sobre la cabeza del animal elegido (llamado el Azazel) al que se le imputaban todos los pecados y abominaciones del pueblo hebreo. Luego de esta ceremonia, el macho sobreviviente era devuelto al campo por un acólito y abandonado a su suerte, en el valle de Tofet, donde la gente lo perseguía entre gritos, insultos y pedradas.
Es de medio pelo
Aproximadamente una centuria atrás, provenientes de la española ciudad de Cádiz, llegaban a Chile y Argentina sombreros confeccionados con pelo de castor. Algunos de ellos, los de mejor calidad y más caros, estaban hechos con pelos enteros extraídos del animal, mientras que otros, los más baratos, sólo tenían parte de pelo de castor. Es decir, algunos eran de pelo entero y otros de medio pelo. Tal situación delataba el nivel social de la persona portadora del sombrero y, así las cosas.
En un santiamén
Desde que las misas se oficiaban en latín, la gente esperaba la bendición del padre para huir del recinto. La expresión en un “santiamén” se refiere a decir la última parte de la expresión “In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti, Amén” a toda prisa, todo para huir lo más rápido posible de la iglesia.
École cua
A pensar de que esta expresión suena bastante fea, tiene un origen culto. Esta interjección que denota que hemos dado en el clavo tiene origen italiano, y es la chilenización de la expresión italiana “eccolo qua o Ecco qui”, que podría ser traducido como “aquí está”. Lo que significa que al fin encontramos la solución a un problema gordo, expresando sorpresa y beneplácito.
F
Falopa
El otro nombre de la cocaína procede de Chile, donde comenzó a ser utilizado por el mundo del hampa. En concreto, del lunfardo, la jerga propia de la ciudad argentina de Buenos Aires, y que se ha extendido a otras ciudades. En Chile se utiliza también la expresión “falopa”, sin la “r”. Su origen puede remontarse hasta el siglo XIV, cuando aparece en Italia el término faloppa, que aplicado a las personas, servía para nombrar de forma negativa a aquellas “tramposas” o “embusteras”. “Faloppa” se trata de un apellido habitual en el país italiano. En Galicia se emplea el término “falopa” o “folerpa” para referirse a las bolas de nieve. Su misterio aún se ha de esclarecer.
Fallamán
Correspondía a un paño de color rojo que se llevaba amarrado al cuello, para evitar que la transpiración descendiera por la espalda. Probablemente esta palabra derivó del inglés fire-man.
Fastimento
Los antiguos mineros usaban esta palabra para referirse a mantener contenta a la mujer.
Fichado
Trabajador al cual se le entregaba una placa metálica numerada (ficha) a la entrada de la faena, para controlar su tiempo trabajando. Hoy se emplea la palabra para designar a una persona sospechosa que se vigila con recelo.
Flaite
Este concepto ampliamente difundido en nuestro vocablo chileno se refiere a las personas asociadas a la delincuencia, la marginalidad y a formas de vestirse. Hay varios posibles orígenes de flaite, uno sería que viene de la palabra en inglés “fly” (volar). En Argentina se referían así a los delincuentes que viajaban en avión entre Buenos Aires y Europa. También fly aparece como una referencia a los que fuman marihuana, ya que eran conocidos como volados. Sin embargo una de las teorías más fuertes, señala que la palabra flaite vendría de un modelo de zapatillas llamado Air Flight desarrollado por la marca Nike. Como eran altamente demandadas por los jóvenes y debido a su alto valor, fueron falsificadas. Los modelos piratas se llamaban Flight Airs, de ahí derivó en “flaiters” y su uso se expandió para referirse a los jóvenes que las usaban, normalmente de bajos recursos.
Flu
Termino empleado para referirse al hollín, causado por el humo. La palabra se utiliza hoy en algunas ciudades de la zona como Lota, manteniendo su significado original, a pesar de que técnicamente no existe según la R.A.E.
G
Gorrera
Se llamaba así exclusivamente a la mujer que engañaba a su marido. Constituía el mayor insulto en su época, incluso mas ofensivo que sacarle la madre. El termino aun hoy se continúa usando, empleado esta vez a la infidelidad de ambos sexos.
H
Hay gato encerrado
Se dice cuando desconfiamos de alguna cosa o nos da en la nariz que hay algo turbio en algún asunto, alguna causa o razón oculta. Para encontrar el origen de esta expresión debemos trasladarnos a los siglos XVI y XVII (Siglo de Oro) cuando se puso de moda llamar “gato” a la bolsa o talego en que se guardaba el dinero. Era habitual llevarlo, como remedio a posibles hurtos, escondido entre las ropas o guardado a buen recaudo en algún lugar de la casa. La víctima en el punto de mira de los ladrones solía ser vigilada para ver si tenía dinero y donde lo llevaba. La consigna que se daban entre sí los amigos de lo ajeno consistía en decir si allí había ”gato encerrado” o, lo que es lo mismo, una bolsa con dinero escondido. Hechas con piel de ese animal, se les empezó a llamar popularmente “gatos” a las que podían contener riquezas desconocidas. Aunque hay quien afirma que por ese nombre también se conocía a los pequeños rateros que hurtaban con astucia y engaño (la RAE así lo recoge), una habilidad que recuerda al comportamiento de los gatos.
Hacer la pega
Este nace en tiempos de la Colonia chilena en el siglo XIX, convirtiendose en sinónimo de hacer el trabajo. Tiene que ver con las argamasas de los puentes o construcciones. Cuando hacías la pega hacías la argamasa con la que tú pegabas las piedras o el calicanto. Es una mezcla de huevo con cal. Los obreros que hacían la pega eran los que más trabajaban.
Hogar, dulce hogar
La frase –Home sweet home, en el original- es parte de una e cación cuya versión española sería: “Por más que cruzemos / la tierra y el mar / siempre extrañaremos tan bello lugar: ¡Hogar dulce hogar!”. Pertenece a una pieza teatral estrenada en Londres en 1823. Su autor, John Howard Payne, fue un excelente dramaturgo y actor norteamericano que vivió en Europa, De Payne es también la letra de esa canción, que prendió en los corazones ingleses en una época en la que las conquistas del Imperio británico obligaban a muchos a dejar su patria para residir en las colonias.
Desde hace 170 años la expresión se repite en todo el mundo. A veces con ironía, cuando la casa se alborota demasiado. Y, con mayor frecuencia, para resumir nuestra añoranza, al sentirnos lejos de la familia y de los objetos queridos.
En 1937 nace en Chile un programa radial que alcanzo notable fama llamado "Hogar Dulce Hogar". Léase: Historia de la Radio en Chile
Huacha
Se ocupa al referirse a u niño o persona que no tiene padres por haberse quedado huérfana. Tambien se escribe Guacho o guachito. Esta palabra (con H, sin G). Tambien hacía referencia a una sección pequeña de la galería al interior de la mina por donde se empujaban los carros.
Huameco
Era el bolsón del trabajador donde llevaba su alimento. A pesar de no ser muy grande a la vista, en su interior bien podían acomodarse varios elementos para la comida. Hoy la misma palabra se emplea para referirse, en sentido un poco mas despectivo, a una persona cahuinera, que habla mas de lo que debe: "Te gastai el medio huameco".
J
¡Jesús!
Significado: Utilizado comúnmente cuando oímos a alguien estornudar, como signo de buena educación. Para averiguar el origen de esta expresión hemos de remontarnos antes del nacimiento de Cristo. Estornudo y divinidad siempre han estado relacionados. Ya fueran los griegos con su ‘vivid’ o los romanos con su ‘salve’, lo cierto es que eso de hacer referencia a los dioses cuando uno estornudaba estaba de moda. Sin embargo, fue en el año 591 cuando esta expresión alcanzó pleno significado. En aquellos años la peste azotó la ciudad de Roma, enfermedad por la que los afectados morían estornudando. Si alguien presenciaba esta escena exclamaba en voz alta “Dios te bendiga” con el fin de que Dios les alejase del peligro. Más adelante se simplificó por ‘Jesús’ (aunque en los países de habla inglesa aún se conserva el manido ‘Bless you’ (Dios te bendiga)).
Jodida
Termino empleado para designar a una mujer embarazada. Como las familias mineras generalmente eran pobres, si una de sus hijas quedaba encinta se decía que estaba jodida, haciendo referencia a que de ahí en adelante tendría muchos problemas (económicos) para criar a su hijo.
L
Es una Lata
Muchas veces en Chile decimos “me dio Lata”, “mucha lata” o “es una Lata”, refiriéndonos a que algo o alguien es aburrido, sin interés. Esta palabra proviene de la cultura mexicana, de sus modismos, y fue adoptada por los chilenos a través del cine mexicano que llegaba en la década del 50´ a Chile. Wikicharlie les deja un ejemplo de 1958, con la película mexicana “Misterios de Ultratumba”, donde Mapita Cortés en el minuto 37:18 dice “¿Ayer les dí mucha lata, no?” [2].
Las ideas no se matan
Frase que expresa la supremacía de la razón sobre la fuerza bruta. Para llegar a la forma con que también ser usarse, bárbaros las ideas no se matan, hay que recorrer un largo camino que desembocan el Facundo de Sarmiento (1845), donde se le menciona como letras destacadas.
En el prefacio es ahora Sarmiento relata que a fines de 1008 40, al dejar el país para exiliarse en Chile, fue golpeado por los más mazorqueros. Cuando llegó a la quebrada del sonda escribió en carbonilla la pared de un salón de las termas On ne tue pas les idees lo hizo en francés por ser ese el origen de la frase y para intrigar a las autoridades como efectivamente ocurrió. La frase original que sufrió diversos cambios pertenece el filósofo Dennis Diderot (1713-1784) quien dijo realidad las ideas no se fusilan. Años antes el propio Sarmiento había adquirido yo hago la versión cuando escribió en un diario no se fusilan ni degüellan las ideas. El agregado de bárbaros es posterior. Pero la exhortación no debe de haber alterado a su destinatario porque siguieron degollando personas y, con ella, sus ideas. No entendían francés seguramente.
Lagrimas de cocodrilo
El llanto de aflicción de cocodrilo es una invención del hombre para poner en palabras o propios sentimientos. Verdad es que del saco lacrimal de esos hostiles a lo líquido que bien puede ser considerado llanto. Pero éste no es resultado de la tristeza, sino del esfuerzo. Por carecer de aparato masticatorio, el cocodrilo no puede reducir a trozos su bocado, que llegan a veces el tamaño de un cordero o de una persona.
La dificultad para tragar lo obliga a forzar el máximo de las fauces y los músculos de la cabeza. Ésa congestión tremenda en la causante del escenario. La acción de llorar mientras se devora con ferocidad una presa ha sido tomada como arquetipo de hipocresía. Una fábula. Como tantas que dejan mal parados a los bichos que nos rodean. Y que se aplique con mucha propiedad algunos seres humanos.
La sal de la tierra
La sal de la tierra de una persona con gracia decimos que tiene salido o que salió. Al hacerlo cabo sin darnos cuenta un largo período en el que llamada sal de mesa fue vital para la subsistencia de mucho pueblo que carecían de ella. Parte del sueldo de las milicias romanas se pagaban con sal (es el origen de la palabra salario solar, y en otras tierras que sustancia formaba parte de los tributos debidos al rey a tal punto representaba un bien precioso, sobre todo los lugares alejados del mar, que la vida si la considera en varios pasajes.
El más conocido es el que figuran el Evangelio según San Mateo, donde Jesús exalta la misión de los apóstoles vosotros hoy la sal de la vida. Y si la Sarh sede de esa zona con que se volverá a salar. La expresión sal de la tierra se aplica body como superlativo para destacar las virtudes de una persona o de un grupo de gente muy valiosa por su bar que su ingenio su inteligencia. Son, como dice la elabora vivificar, el condimento esencial de la vida. Sin ellos, sin sus palabras sus obras, pozo volvería a tratamiento y bostezo. Insoportablemente soso.
Las paredes oyen
Señal de advertencia para que se tenga cuidado con lo que se dice en determinado momento y lugar. Procede de Francia, del tiempo de las persecuciones contra los hugonotes que culminó en la histórica “Noche de San Bartolomé”, episodio sangriento de las luchas religiosas que asolaron en la segunda mitad del siglo XVI. Cuentan los cronistas que fueron la reina Catalina de Médicis, esposa de Enrique II, rey de Francia, desconfiada y perseguidora implacable de sus rivales, y el duque de Guisa, quienes instigaron a los católicos a llevar a cabo la matanza de hugonotes (seguidores de Calvino) la noche del 24 de agosto de 1572. Con el fin de poder escuchar a las personas de las que más sospechaba, mandó construir conductos acústicos secretos en las paredes de sus palacios y así prevenir cualquier conjura que se estuviera tramando en su contra.
Le falta un tornillo
Aunque cambie su formulación, siempre es empleada para señalar que alguien no está del todo cuerdo, que por sus acciones o por sus pensamientos, ha perdido o está perdiendo la razón. Algunos se atreven a manifestar que todo se inició con la Revolución Industrial de fines del siglo XVIII, cuando las máquinas empezaron a formar parte de la vida cotidiana. La mayoría de las personas no sabía muy bien cómo funcionaban, pero entendían que la falta de una pequeña pieza (como lo es un tornillo) podía ser la causa de su mal desempeño. Hoy contamos con otras expresiones que apuntan a lo mismo: “Se le corre la teja”, “esta peinando la muñeca”, “no le sube agua al tanque” o “le falta una corrida de ladrillos”.
La necesidad tiene cara de hereje
Quienes encuentran la miseria ser obligado a dejar de lado los escrúpulos y el orgullo para avenirse a cualquier circunstancia. Parece tal es el sentido de esta expresión, que lleva muchos años circulando sin producir mayor inquietud. Como si existiera un identifique la herejía.
En verdad la frase es la traducción deformada de un la sentencia latina a la que echan mano los abogados para defender al individuo que comete un delito llevado por la desesperación necesitas caret lege . O sea la necesidad carece del caso típico de quien por robar un pan para no morirse de hambre no recibe condena. De carnets le deje el oído popular y la fantasía fabricaron ese hereje cuya cara asoma en el dicho.
Los años no pasan en balde
Su significado viene a decir que el tiempo hace mella y no transcurre en vano. La teoría más comentada sobre el origen de este dicho proviene de la transmisión que hizo Miguel de Cervantes de la experiencia de un personaje que conoció durante su cautiverio. Resulta que el tal sujeto de Castilla la Vieja, llamado Rodrigo, le narró su apresamiento a manos de los moros, el cual fue confinado a galeras y se le encomendó, aparte de la función de remero, la de achicar el agua que entraba en la bodega. El balde que usaba para tal cometido fue su compañero de viaje durante meses. En ese tiempo, en el que envejeció sobremanera, reunió el dinero suficiente para comprar su libertad y siendo transportado por el barco que le llevaba de vuelta al hogar tuvo la mala fortuna de ser apresado de nuevo y por un capricho del azar vuelto a recluir en la misma galera. Al ver el cubo que le había acompañado durante el tiempo anterior dijo con una triste ironía "Los años no pasan en el balde pero en mi sí". Esa frase se ha transformado hasta llegar a nuestros días tal y como la conocemos
Luca
Es actualmente el billete de mil pesos, pero también la usamos para el dinero en general. La palabra surgió en el siglo XVIII cuando se llamaba “pelucona” a una moneda de oro en la que aparecía el monarca con una gran peluca. Después, por acortar la palabra, se cambió a “peluca” y luego pasó a ser simplemente luca. Siempre hemos tratado de ahorrar letras y aire en pronunciarlas.
Llorar la carta
La expresión nada tiene que ver con la suerte de los naipes. Se refiere una forma de pedir dinero que era habitual en antaño. Una persona pobremente vestida y acompañada de un par de criaturas llamaba la puerta de una casa y entregaba a quien atendió la carta firmada por algún personaje conocido. Así, con lujo de detalles cómo se escribía la afligente situación de su familia solicitando ayudarla en todo lo posible. seguía una lista de quiénes y con cuanto ya habían contribuido.
Mientras el dueño de casa iba leyendo, su visitante se lamentaba lloraban arcos como resistirse a esa extorsión de lágrimas y tinta como no darles unos pesos. La frase tiene oye un sentido más general resume un gráficamente la actitud de quienes hacen un despliegue de todas sus desdichas para obtener algo a cambio.
M
Más vale pájaro en mano que cien volando"
Empleamos este refrán para expresar que ante la perspectiva de conseguir algo más favorable es mejor quedarse con lo que ya poseemos, no vaya a ser que al intentar alcanzarlo nos quedemos sin lo que ya teníamos y sin lo que esperábamos poseer.
Este modismo es heredero del proverbio latino "Est avis in dextra, melior quam quattuor extra", que viene a significar: "Es mejor un ave en la mano derecha que cuatro fuera de ella". Se cree que su origen viene del antiguo arte de la cetrería, donde se valora el hecho de tener un buen ave depredadora (halcones generalmente) para su práctica y el dicho remarca el hecho de la posibilidad de perder el que tenemos intentando buscar otro mejor.
Maestro chasquilla
El vocablo "chasquilla" surgió de una voz quechua que quiere decir desarreglado. En Chile, se les llama así a los maestros que hacen de todo, pero sin la prolijidad debida. La frase empezó a usarse como consecuencia del aspecto desaliñado que presentaban algunos electricistas, gasfíteres, pintores y carpinteros en el pasado. El vocablo "chasquilla" surgió de una voz quechua que quiere decir desarreglado. En Chile, se les llama así a los maestros que hacen de todo, pero sin la prolijidad debida. La frase empezó a usarse como consecuencia del aspecto desaliñado que presentaban algunos electricistas, gasfíteres, pintores y carpinteros en el pasado.
Marca chancho
En 1930 se hizo famosa una cerveza que tenía un nombre inglés: Pig (chancho en castellano). Esta inspiró a unos fabricantes de cigarrillos muy baratos y de calidad incierta para crear una variedad de tabaco que identificaron como cigarrillos "Marca Chancho". Así nació el calificativo peyorativo para referirse a productos de origen dudoso. Léase: Historia del cigarrillo en Chile
Me importa un pucho
Este vocablo proviene de la voz mapudungún "puchum", referido a las sobras o residuos de algo. Partiendo de esta palabra, apareció en el lenguaje popular la frase "me importa un pucho" para indicar que algo no tiene valor o no es digno de consideración.
Mojarse el potito
Significa atreverse, aventurarse, decidirse a hacer algo donde se corren riesgos. Antigua frase usada en campos del Maule desde tiempos de la colonia chilena, cuando había que cruzar a caballo un estero o un río y su profundidad se desconocía. En esa circunstancia era frecuente que alguien exclamara parece que nos vamos a tener que "mojar el potito". Muchas veces había que hacerlo por apoyar a los patrones, llevando animales a pastar o llevando recados de un lado a otro. La única forma de apoyar al patrón era "mojándose el potito, pa´pasar al otro lado y cumplirle al patrón".
Morir de amor
Se habla corrientemente de las agonías del amor, y el tema inspira óperas, best-sellers, tangos, boleros y culebrones. La idea de que el sentimiento amoroso está fatalmente asociado con el final de la existencia nos viene desde muy atrás como lo prueban las lenguas más antiguas. Del indoeuropeo (lengua madre del sánscrito, el griego y el latín) heredamos la raíz wen- que significa desear intensamente, querer, amar.
De allí viene Venus, nombre de la diosa del amor, de donde salió venéreo, que antes se refería al amor físico y hoy sólo se aplica a ciertas enfermedades sexuales. Y también venerado, persona idolatrada. Pero los filtros de amor y los sufrimientos atroces propios de un amor no correspondido hicieron que de la misma raíz wen– derivase además una palabra terrible, veneno. Así surgió la alianza entre las palpitaciones del corazón y su interrupción definitiva. Amar y morir quedaron unidos, sobre todo entre los románticos y los adolescentes, tan amigos ambos de las expresiones tremendas. Cuando “morir de amor ” no va más allá de una manera de hablar, la sustituye una frase bastante más prosaica: “ hay amores que matan”.
Me costó un ojo de la cara
Se utiliza para hacer entender que se ha conseguido un objetivo pero que su costo ha resultado por demás elevado. En el siglo XVI, durante las expediciones para explorar y conquistar “las Indias”, el conquistador manchego Don Diego de Almagro perdió un ojo por culpa de una flecha en el asedio de una fortaleza Inca. Al regresar a España se presentó ante el rey Carlos I y al despachar sobre la acometida en las nuevas tierras de la corona Don Diego se lamentó que: “El negocio de defender los intereses de la corona le había costado un ojo de la cara”. Se supone que insistió tanto en el hecho de haber perdido el ojo que pronto esta frase se difundió rápidamente entre la corte, los soldados y el pueblo, llegando así hasta nuestros días.
Mala leche
Empleamos este modismo al hablar de alguien que tiene mal carácter, es mal intencionado y o realiza acciones dañinas.
Era costumbre antiguamente (desde la prehistoria hasta el Siglo XIX), que en multitud de familias, especialmente las que tenían una posición acomodada, tales como nobles, realeza, etc, emplearan amas de crianza o nodrizas para dar de amamantar a los hijos de las madres que o no podían, debido a problemas de lactancia, tiempo, etc. o no lo deseaban. Dicha costumbre, sumada a la creencia asentada que sostenía que los hábitos y forma de ser de una persona eran transmitidos al lactante en el amamantamiento, hacía pensar que cuando un bebé al crecer mostraba maldad, mal comportamiento, etc, había sido por culpa de su nodriza, la cual "tenía mala leche" o "era de mala leche".
Esta expresión ha llegado hasta nuestros días y se emplea con frecuencia en los casos arriba citados.
Me lo contó un pajarito
En Grecia y Roma, sobretodo en la última, se creía que los pájaros, al ser dueños del vuelo, poseían características magnificas de percepción. Como con el tiempo comenzaron a ver que ante una tormenta severa las aves eran las primeras en evacuar la región, los romanos, las designaron como portadoras del saber futuro. De hecho el rito de los Augurios, donde se intentaba predecir el futuro, se basaba en observar el volar de los pájaros -al igual que lo hicieran Rómulo y Remo esperando ver 12 pájaros para fundar Roma-. De Aquí viene que el dicho “me lo contó un pajarito” signifique que nos enteramos de algo “misteriosamente”.
Meterse en camisa de once varas
La expresión hoy se aplica para advertir sobre la inconveniencia de complicarse innecesariamente la vida.Su origen se sitúa en la jerga castrense de la Edad Media, refiriéndose a la dificultad que conllevaba el asaltar una camisa (parte del muro exterior de un castillo entre torres de flanqueo) de once varas de longitud, debido a que de esta manera, uno era extremadamente vulnerable al ataque con armas arrojadizas desde ambas torres de flanqueo. Una vara son treinta y tres pulgadas, lo que equivale a unos ochenta y cuatro centímetros. Así, la camisa o sección de la muralla exterior mediría 363 pulgadas o bien 9.24 metros.
Me importa un pito»
El pífano o el «pito» era el chico que tocaba tal instrumento en el ejército. Su paga era muy baja. Por tanto cuando utilizamos la expresión «me importa un pito» damos a entender que le damos muy poco valor al asunto.
Morder el polvo
Hacerle “morder el polvo” a alguien significa vencerlo, derrotarlo física o espiritualmente. El modismo se basa en una remota acción de los señores medievales, de los que pertenecían a los sectores sociales más encumbrados. Cuando un caballero se sentía mortalmente herido en batalla, tomaba un puñado de tierra y lo mordía. En dicha actitud quedaba de manifiesto el amor y el respeto a su tierra, demostrado en forma de postrer beso. De allí que quien “mordía el polvo”, lo hacía porque se sabía irreversiblemente derrotado y a punto de dejar este mundo.
Mucho ruido y pocas nueces
No es muy segura la procedencia de este modismo, aunque circula por España una anécdota que podría explicar el origen del dicho. Según cuenta el conde de Clonard, en 1597 las tropas españolas tomaron la ciudad de Amiens merced a una treta urdida por el capitán Hernán Tello de Portocarrero, que vistió de labradores a dieciséis de sus soldados que hablaban muy bien en francés. Estos hombres penetraron en la ciudad provistos de sacos de nueces, cestos de manzanas y un carro de heno. Apenas entraron en la ciudad, uno de los soldados dejó caer voluntariamente uno de los sacos de nueces, lo que movió a los soldados franceses a recoger las nueces del piso. Esta situación permitió a los españoles que sacaran sus armas de la carreta de heno y así reducir a las tropas locales para permitir el ingreso de una columna invasora. Posteriormente, los franceses recobraron la plaza, pero la astucia de la estratagema habrían dado origen al dicho ser más el ruido que las nueces. Con el correr del tiempo, la frase pasó a ser parte del uso popular, como manifestación de exagerada demostración de un hecho que no tiene tanta trascendencia.
N
Ni chicha, ni limonada
Significa que no es lo uno ni lo otro. No tiene valor alguno.Sabemos que la chicha es la bebida alcohólica resultante de diferentes frutos como la uva y el maíz en agua azucarada, mientras que la limonada, está hecha a base de limón. El dicho “ni chicha ni limonada” surgió en ciertas reuniones festivas de la colonia americana, especialmente en Chile, Argentina, Venezuela, para advertir a los concurrentes que llegaban, que no hay o no quedaban ni bebidas alcohólicas ni refrescantes. En Chile también se llama chicha a las bebidas obtenidas de la fermentación de diversas frutas, y que en algunos lugares también son mezcladas con un aguardiente o similar. Por otra parte, entre los mapuches se consume un tipo de chicha de maíz o trigo llamada muday. En la zona Central, la chicha se prepara como un fermentado de uvas más rústico que el vino que se suele consumir en abundancia en todo el territorio chileno en días festivos, como las Fiestas Patrias; con harina tostada se llama «chupilca».
No hay moros en la costa
Tras la Reconquista, las costas de España estuvieron dos siglos sometidas a la piratería, hasta tal punto que se decía que un pueblo se acostaba normal y se despertaba desierto, con los hombres muertos, y las mujeres y los niños esclavizados de camino a los puertos piratas del norte de África. Para evitar tales ataques, pues los moriscos expulsados conocían la zona e indicaban dónde y cómo atacar, se trasladaron los pueblos al interior y se colocaron vigías en las costas. Cuando no había moros en la costa significaba que no había peligro.
No deja títere con cabeza
Criticar con saña, pero también se entiende en referencia a alguien capaz de muchas conquistas amorosas. En el origen está una escena de "Don Quijote de la Mancha" escrito por Miguel de Cervantes. Mientras ve una representación teatral con títeres, Don Quijote pasa de espectador a actor y decide defender a la protagonista —una princesa de madera y trapo— descabezando a todos los otros muñecos.
O
Ojo por ojo, diente por diente
Esta frase, que consagra la venganza como un procedimiento jurídico, figura en dos de los 282 artículos del Código Hammurabi (1792-1750 a. C.), fundador del imperio babilónico. La menciona también el Antiguo Testamento al referirse a los actos de violencia. “Quien cometiere e delito”, dice el texto bíblico, “pagará vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano y pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida y golpe por golpe”. Cuando el agredido prefería que se lo compensara con dinero, tenía derecho a una suma, fijada de antemano de acuerdo con la gravedad del daño. Así, según la ley del talión del derecho romano, quien recibía una cachetada podía canjear ese golpe por un monto equivalente a 5 ó 6 dólares de hoy.
El dicho, con frecuencia abreviado como “ojo por ojo”, no pasa en la actualidad de un modo de hablar. Un desahogo para el rencor. Y prueba de que la idea de devolver mal por mal es siempre tentadora. Pero ningún código moderno autoriza a desdentar o volver tuerto al ofensor.
Ojo al charqui
Charqui es una palabra quechua; con ella se denominaban a la carne cortada en lonjas delgadas, que se salaba y se secaba al sol. Para que no se lo robaran otras personas o animales, era necesario vigilarlo permanentemente. Así nació esta frase, que se emplea para advertir que algo debe ser supervisado con especial atención.
P
Paco
Se usa para referirse a nuestros queridos carabineros. Dicen que viene de la palabra quechua p’aqo que significa rubio o castaño claro. En los antiguos vigilantes de Santiago, al contratar a alguna persona para labores de "vigilante", en el contrato al lado del nombre aparece la sigla P.A.C.O. que significaba: contratado como "Personal A Contrata para el Orden". Otra teoría es que en el siglo XIX la policía (entonces llamados "serenos") utilizaba un poncho de ese color, que se transformó en color “paco”, pues el color del uniforme era parecido al pelaje de la "Llama paco". En Minería especialmente en Lota, se utilizaba para nombrar al operario que vigilaba constantemente el tránsito de los convoyes cargados o vacíos en las vías principales al interior de la mina.
Pájaro de mal agüero
El pájaro de mal agüero tiene un origen que se remonta a la antigua Roma. Realmente eran muy supersticiosos y tomaban todas sus decisiones importantes consultando oráculos. Uno de los ritos de adivinación más comunes era predecir acontecimientos basados en el vuelo de buitres o cuervos. Si el ave era portadora de malas noticias, se decía que era un ave de mal agüero. Desde entonces y hasta ahora, se usa esta frase para designar a las personas que están saladas.
Pololear
Si en Chile estás pololeando quiere decir que tienes una pareja estable o una relación afectiva con un cierto grado de formalidad, pero sin un vínculo legal. Es distinto a ser novios, ya que eso implica un compromiso a casarse en el futuro, en el pololeo no. El origen de la palabra se remonta hacia 1880. En esa época era común ver coleópteros que se acercaban al fuego y a la parafina. Esta afinidad de los insectos, llamados pololos, por las llamas, motivó a los bomberos de una compañía en Santiago a mandar a hacer una insignia con su figura. Entonces, después, como símbolo o prueba de amor se las regalaban a las enamoradas, por esto se les empezó a decir pololas.
Pisar el palito
Cuando, inducido por otros, alguien hace justo lo que lo perjudica, suele decirse que ese individuo “ha pisado el palito”. La frase vale se debe a una jaula-trampera que hasta no hace mucho se vendía en los comercios. Tenía una suerte de puertita o ventana rebatible provista de una barra corta o palito. Junto a ese apoyo se colocaba agua, lechuga y alpiste como cebo para que se posara algún pájaro suelto.
Ni bien lo hacía, su peso ponía en acción un resorte que desplazaba rápidamente esa parte de la jaula dejando encerrada a la presa. José Gobello, por su parte, atribuye el dicho a los ladrones de gallinas. De noche, éstos metían una vara en el gallinero, el animal se agarraba al palo dejando así que los ladrones lo retiraran en silencio.
Nada impide que ambas versiones se ajusten a la verdad. Al igual que las aves de corral y los pajaritos, nadie está libre de portarse incautamente. Y nunca falta gente de mala fe dispuesta a hacer que alguien pise en un descuido el palito de la ingenuidad.
Pinganilla
Se usa peyorativamente para designar a las personas que son de una clase social baja, pero que fingen ser muy elegantes.
La palabra deriva de “pinga” que significa, percha, trapo que cuelga. En el siglo pasado esta expresión estuvo muy en boga porque a fines de 1840 llegó a Chile un circo que traía animales que se vieron por primera vez en el país. Entre ellos había un elefante, camellos pero se destacaba entre ellos un mono muy gracioso, que se llamaba “pinganilla”. A la gente le llamo mucho la atención, su vestimenta roida, desgastada y sus conductas divertidas, esto de inmediato dio pie para que los chilenos usaran el nombre como "apodo" para clasificar a las personas mal vestidas y de categorías sociales diferentes con ciertos apelativos.
Pan y circo
Esta frase se origina en Roma en la Sátira X del poeta romano Juvenal (circa 100 A. D.). En su contexto, la frase en Latin panis et circenses («pan y juegos del circo») es dada como la última atención del pueblo romano, quien había olvidado su derecho de nacimiento a involucrarse en la política. Juvenal muestra su desprecio por la decadencia de sus contemporáneos romanos. Los políticos romanos visualizaron un plan en 140 a. C. para ganar los votos de los pobres; Al regalar comida barata y entretenimiento, los políticos decidieron que esta política de «pan y circo» sería la forma más efectiva de subir al poder. Juvenal hace referencia a la práctica romana de proveer trigo gratis a los ciudadanos romanos así como costosas representaciones circenses y otras formas de entretenimiento como medio para ganar poder político a través del populismo. Julio César mandaba distribuir el trigo gratuitamente, o venderlo muy barato, a los más pobres, unos 200.000 beneficiarios. Tres siglos más tarde, Aureliano continuaría la costumbre repartiendo a 300.000 personas dos panes gratuitos por día.
Poner en tela de juicio
Poner en tela de juicio. Expresa, dejar entre paréntesis, dudar hasta la espera de examinar lo que se dice y someterlo a prueba. Aunque no viene de los tribunales, el dichoso remontar la época de los caballeros medievales y nada tiene que ver con la industria textil.
La tela que aquí se menciona era la empalizada que en los torneos separaba los rivales que combatían a caballo. Alguna de esas lides que se realizaban para someterse al llamado juicio de Dios, mediante el cual se dirimió un derecho. Poner en tela de juicio era entonces llevar a la palestra (un sinónimo de pera) mucho los pleitos que en los tiempos que corren habitualmente se ventilarían en un juicio. O diría la frase ha perdido su sabor guerrero. Al oírla, nadie piensa lanzar mi cabalgadura. En cuanto los individuos que sistemáticamente ponen todo en tela de juicio, son desconfiados crónicos. Se le quisieron cuanto no les cuesta suena familiar a la palestra de la incredulidad y la sospecha.
Por si las moscas
Usamos este modismo como sinónimo de "por si acaso", "por lo que pueda suceder". Por ejemplo: "Aunque no he estudiado nada haré el examen por si las moscas, no vaya a ser que apruebe".
Existen dos teorías principales para el empleo de este uso. Uno de ellos es el higiénico y antiguo gesto de tapar la comida para evitar que los insectos, portadores de enfermedades, estuvieran en contacto con ella; la comida se protegía "por si las moscas" la pudieran estropear. La otra está relacionada con la leyenda de San Narciso, otrora Obispo de Gerona y actualmente patrón de la capital. Cuenta la misma, que durante el asedio de las tropas de Felipe II de Borgoña (El Audaz) a la ciudad gerundense en el año 1286, de la tumba del Santo, la cual abrieron las huestes invasoras con el objeto de profanarla, salieron multitud de moscas que atacaron a las tropas francesas contangiándolas la peste y haciendo que cundiera el pánico. Cuentan que a partir de ese momento la expresión empezó a ser empleada en múltiples circunstancias como recuerdo de aquel hecho.
Pasar la noche en blanco
Pasar la noche en blanco la expresión se remonta a la época de los caballeros andantes. Antes ser armado como tal y salir al mundo en defensa de las causas nobles caballeros noveles. Como entonces se lo llamaba debían someterse a un ritual de calumnia cuando, como la espada de plano, soberano o el señor que lo adivinaba le daba un leve golpe nos honró la espalda. La noche anterior hace a la ceremonia candidato permanecían velas rezando al pie del altar donde se depositaron sus armas. Éstos recibían el nombre de arma blanca o en blanco tanto que por no haber tenido uso ninguna empresa de caballería como por no llevar aún ninguna divisa escudo. La larga, el calificativo en blanco cabo por referirse tanto las armas como la vigilia. Por eso cuando oí un dolor de muelas o la preparación de un examen no impide pegar un ojo, 10º que no pasó la noche en blanco. La frase ha perdido su fantasía quijotesca pero conserva un sentido tan válido como en los tiempos heroicos.
Patas negra
Se refiere al amante furtivo, que programa sus "visitas" cuando el marido no está en casa. Recibe este nombre porque cuando tiene que huir, muchas veces no alcanza a vestirse y sólo se pone los calcetines, generalmente "negros". Otra versión habla de un minero de Lota, quien visitaba a la esposa de su jefe, llegando con los pies descalzos y teñidos por el carbón.
Poner los cuernos
Emplemos este uso para indicar de alguien que ha sido infiel a su pareja con otra persona o personas. En el medievo, los señores vikingos tenían el derecho de poseer a las mujeres de los campesinos. Para indicar que se encontraban en ese momento íntimo, colgaban de las puertas un cuerno. Con el tiempo el uso de este dicho pasó a plural hasta llegar a la expresión que hoy en día conocemos.
Poner los puntos sobre las íes
Empleamos este uso cuando pretendemos poner orden en algo, poner las cosas en su sitio o aclararlas, "Le tuve que poner los puntos sobre las íes en ese asunto". Esa expresión se remonta al Siglo XVI. Cuando se empleaban los caracteres góticos se solían confundir las palabras que llevaban dos íes juntas con las que llevaban una u, por eso se ponían unas pequeñas marcas sobre las íes para diferenciarlas. De esa forma la letra i viene representada en la actualidad con un punto.
Prometer el oro y el moro
El origen de esta frase irónica, que se emplea cuando alguien formula una promesa exagerada o vana, se remonta al año 1426, en tiempos de Juan II de Castilla. Según narra la leyenda, Abdalá, el alcaide de la ciudad malagueña de Ronda, y su sobrino Hamet, entre otros de su séquito, fueron apresados por un grupo de caballeros cristianos de Jerez. A pesar de que Abdalá pagó la fuerte suma de dinero exigida por el rescate de los cautivos, solamente él fue puesto en libertad. El suceso llegó a oídos de Juan II, que ordenó que el sobrino también fuese liberado.
Sin embargo, los raptores jerezanos, incitados por la esposa de uno de ellos, se negaron: pedían a los moros un plus de cien doblas –monedas castellanas de oro– a cambio de Hamet. Debido a lo cual, el rey hizo trasladar al prisionero a la corte. Y puede que a raíz de este episodio, el pueblo andaluz creyera que lo que verdaderamente buscaba el monarca era tener cerca al moro para luego reclamar el oro.
Poner las manos al fuego
“Aquel a quien la llama no queme debe ser creído”, se lee en el más antiguo código hindú. Durante muchos siglos y en las culturas más diversa fue común recurrir a la prueba del fuego para averiguar si el acusado de un delito grave -como la hechicería en la edad media- era o no culpable. Las leyes anglosajonas, por ejemplo, establecían cuantos pasos debía caminar el incriminado sosteniendo en la mano un hierro caliente de un peso determinado. Si lograba llegar al final sin soltarlo, era proclamado inocente, de lo contrario, puesto que el juicio de Dios le había resultado adverso, se lo condenaba a muerte.
La frase se emplea hoy para responder de la veracidad o de la conducta de una persona que se considera digna de absoluta confianza. Firmar un aval, salir en defensa de alguien que está más allá de toda sospecha, recomendarlo sin cortapisas, son modos atenuados de poner las manos en el fuego, en tiempos que ya no rigen aquellos bárbaros procedimientos judiciales. De no ser así, ¿cuanto se animarían a arrimar un solo dedo, aunque apenas se tratara de la llama de un fósforo a punto de apagarse?.
Ponerle pino
Esto quiere decir realizar una actividad con muchas ganas y con esfuerzo. El pino, obviamente, no se refiere a los arboles sino que al relleno de las empanadas que se compone de carne, cebolla, huevo y pasas. Entonces, rellenar una empanada con harto pino, es una empanada hecha con ganas.
Pilchas
Pilchas es usado para referirse a la Ropa. Palabra adoptada de los tangos argentinos. Revisar enlace [3].Cada una de las partes del apero o recado de montar.
Q
Quedo como chaleco de mono
Léase: Historia del Circo Chileno / 1940: Pinganilla
Es terminar muy mal, luego de una situación desastrosa. La expresión se origina en las vestimentas de los simios que acompañaban a los organilleros. Estos trajes constaban de unos chalecos harapientos y andrajosos que se caracterizan, para colmo de males, por sus colores chillones de mal gusto.
Quien fue a Sevilla perdió su silla
Empleamos este uso cuando alguien que quiere recuperar, tras una ausencia, un cargo o sitio que tenía previamente agenciado, se lo encuentra ocupado.
Su origen histórico se remonta al reinado de Enrique IV, en el Siglo XV. Por aquel entonces se le concedió el arzobispado de Santiago de Compostela a Alonso de Fonseca y Acevedo, un sobrino de Don Alonso de Fonseca y Ulloa, que estaba al frente del arzobispado de Sevilla. Don Alonso de Fonseca y Ulloa, más conocido por Alonso I, se implicó personalmente en que su sobrino obtuviera el cargo, que era trambién deseado por el conde Osorio de Trastámara. Una vez que su pariente accedió al cargo, no tuvo gran habilidad política en sus formas de recuperar los privilegios que los señores feudales gallegos habían revocado a la Iglesia. Por ello Alonso I decidió intercambiar el arzobispado de Sevilla por el de Santiago durante un tiempo. Al finalizar su gestión quiso volver a ocupar su anterior puesto, pero su sobrino se negó en redondo y tuvo que recurrir a la fuerza y al beneplácito papal para restaurar su posición. Por supuesto el pueblo confeccionó este dicho recordando tal hecho que tuvo gran repercusión en la época.
Quedó para vestir santos
Quedarse soltera sin desearlo. Hace más de cien años, las mujeres jóvenes que iban a rezar en las iglesias tenían por costumbre, también, ayudar en el arreglo de los altares de los santos. Se le rezaba mucho a San Antonio pidiéndole un marido o al menos, un novio. Se hacía además una ofrenda, cambiando un alfiler nuevo por otro bautizado con agua bendita. El mito de la solterona está recreado en el film de Torre Nilsson "Para vestir santos" (1955), con Tita Merello.
Que Plancha!
Con esta palabra hacemos alusión a tener vergüenza o sufrir una situación embarazosa. El uso de “plancha”se originó a partir de las fiestas en que las jovencitas esperaban sentadas a que un hombre las invitara a bailar. La mujeres hablaban de “planchó toda la noche”, cuando una mujer no era invitada a bailar en durante toda la velada. Incluso eran reconocidas como “planchadoras”, lo que era una humillación.
R
Renacer de las cenizas
La idea de volver a alzar vuelo después de una gran crisis suele ser alegóricamente expresada mediante la antiquísima leyenda egipcia del ave Fénix. Un pájaro fabuloso de brillante plumaje dorado y escarlata que emitía un canto muy melodioso y cuya vida se extendía -las versiones difieren- entre los cinco y los once siglos. Antes de morir, el Fénix -del que existía un único ejemplar-, se preparaba un nido hecho con ramas de árboles raros y hierbas aromáticas al que se prendía fuego, y el ave se extinguía entre sus llamas.
Resucitaba muy pronto de las cenizas, intacta y rejuvenecida, para vivir otra vez por siglos. La creencia -que evoca la muerte diaria del sol y los otros fuegos de un nuevo amanecer- dio lugar al dicho “renacer de las cenizas” y a su equivalente, menos empleado, “ser como el ave Fénix”. Una metáfora que condensa el destino de aquellos que, tras un fracaso que se creyó definitivo, retoman con el fervor y la fortuna que suponían para siempre incinerados. El nombre del ave también se aplica a quien, por sus cualidades, excede la comprensión humana.
S
Sacar la ñoña
Cuando a alguien le dan una paliza descomunal. Para comprender esta expresión es necesario tener presente que la "ñoña" -de acuerdo con el castellano antiguo- es el excremento de las aves domésticas. Por lo tanto, cuando a alguien es golpeado sin piedad, llega al extremo de que no puede retener los excrementos.
Salvado por la campana
Empleamos este uso para indicar que alguien ha salido de una situación arriesgada en el último momento. El origen de esta expresión proviene del argot pugilístico y data de finales del Siglo XIX. Alude al hecho de que un contrincante se librara de perder un combate por la finalización de un "round" el cual era marcado por el sonido de una campana como en nuestros días. Existe una falsa creencia difundida por e-mail de que el origen data del Siglo XV. En el mismo se explica, que dado el escaso conocimiento médico por aquel entonces, era frecuente dar por muertas a personas que tenían afecciones como la "catalepsia" e incluso las que estaban en "coma". Estas eran enterradas vivas. El bulo relata que se ideó un sistema que consistía en atar un hilo a la muñeca del falso difunto y conducirlo a través de un agujero del ataúd hasta atarlo a una campana en la superficie, la cual era vigilada durante unos días por si se trataba de una falsa muerte y el enterrado se movía haciéndola sonar, así desenterrarlo rápidamente. Sí es cierto que más adelante, dada la preocupación que se tenía de morir enterrado, se idearon sistemas para evitarlo, pero no se tiene constancia de que se hayan probado realmente.
Se fue de espalda el loro
La frase “espalda el loro” proviene de mediados del siglo XIX, cuando a los ágiles mineros se les ocurrió enjaular pequeñas aves y dejarlas en medio de las faenas de trabajo a varios cientos de metros de profundidad.
Como el gas que se desprendía por entre las rocas era explosivo y tóxico, quien primero detectaba su presencia era el pequeño loro enjaulado, el que en pocos segundos, perdía la vida en su jaula. Cuando un minero se daba cuenta, gritaba; “se fue de espalda el loro!” a refugiarse!
Sembrar Cizaña
La rivalidad y el rencor, la mala fe y la desconfianza recíproca componen la parte envenenada de las relaciones humanas. En una transparente parábola del Evangelio según San Mateo, Cristo la comparó a la rivalidad con la cizaña. La cizaña es una planta que puede crecer junto al centeno y otras gramiñas, contiene una sustancia muy tóxica que al pasar a la harina causa la muerte de quienes comen el pan hecho con ello.
No era raro en otro tiempo que la cizaña fuera sembrada furtivamente por algún enemigo, de allí la preocupación de los dueños de campo por arrancarla antes la cosecha. Grano y cizaña quedaron así como metáfora para referirse a lo bueno y lo dañino, a las intenciones sanas y a los propósitos perversos.
Hoy el sentido corriente de sembrar cizaña es el de poner a uno con contra otros. Tal vocación por enfrentar y divivir dió lugar a un adjetivo que nada tiene que ver con las plantas, a quienes van por el mundo multiplicando enemistades se los califica con razón de cizañeros o cizañosos. Son, en otra palabra los agricultores de la discordia.
Se armó la de San Quintín
Alude a la batalla que tuvo lugar el día de San Lorenzo, el 10 de agosto de 1557, ganada por las armas españolas de Felipe II contra los franceses, y en la que los Tercios estuvieron dirigidos por Manuel Filiberto, duque de Saboya.
Si la montaña no viene a Mahoma
Mahoma convenció a sus seguidores de que a una orden suya se le iba a acercar una montaña desde la cual predicaría. La muchedumbre se reunió; Mahoma llamó una y otra vez a la montaña y cuando ésta no se movió de su lugar, el profeta dijo sin abochornarse: “Si la montaña no viene a Mahoma, Mahoma va a la montaña”. Este texto no pertenece a ningún libro religioso ni procede de Oriente. Figura en los Ensayos de Sir Francis Bacon (1561-1626), filósofo inglés y canciller del reino, quien fue precursor del método experimental en la ciencia y uno de los más firmes adversarios del conocimiento dogmático y supersticioso de la Edad Medía.
Se armó la Tole Tole
El origen del dicho sería el desorden provocado por la turba durante el juicio que llevó a Cristo (0-33) a la crucifixión, cuando los judíos se alborotaron para inducir a Poncio Pilatos a que se inclinase por ejecutar a Jesús en lugar de Barrabás, carismático ladrón de la época. La muchedumbre, enardecida, gritaba: “¡Tole, tole, crucifige eum!”, que en español sería: “¡Quítalo, quítalo, crucifícalo!”
Salvarse por un pelo
La frase se usa para dar idea de que se salió de un aprieto por muy poco, casi de milagro. Mucho tiempo atrás, el oficio de marino no requería necesariamente la obligación de saber nadar y, de hecho, había hombres de mar que no podían ni flotar en el agua. Por ello, cuando un día un jefe de la armada española, basado en razones de higiene, dio orden de que todos se raparan al cero, los marinos protestaron, argumentando que se les privaba de un recurso muy valiosos en caso de naufragio, ocasión en la que muchas veces se salvó la vida de una persona tomándola de su cabellera. Ante la razonable excusa, en 1809 se expidieron las autoridades permitiendo el uso del cabello sin límites de longitud. En la actualidad, no se admiten marineros que no sepan nadar.
Se armó la gorda
Hoy refiere a cualquier tipo de problema más o menos grave, incluyendo a una guerra o a una simple trifulca familiar. A mediados del siglo XIX España era una potencia en franca decadencia, había perdido la mayoría de sus territorios coloniales en América y el descontento en la población crecía sin pausa. Ante tal debacle, comenzó a generarse un movimiento revolucionario que estalló en 1868. El levantamiento, por cuya causa la reina Isabel II (1830-1904) debió abandonar el país, vino precedido de un insistente rumor callejero en el que se utilizó un giro idiomático muy castizo: “se va armar la gorda”. Con dicha sentencia se aludía a que se avecinaban conflictos de alto calibre; más específicamente, con “la gorda” la gente se refería al alzamiento militar, que en septiembre de ese año finalmente se concretó. Dicha revolución fue conocida como La Septembrina o La Gloriosa
Sacar de quicio
Empleamos este uso para indicar que algo o alguien ha agotado nuestra paciencia y nos produce un estado de intranquilidad y exasperación considerable. Ejemplo: "Mientras explicaba la lección los alumnos se dedicaron a hablar y alborotar, me sacaron de quicio". También se emplean fórmulas como "Desquiciar", "Estar desquiciado", "Desquiciarse".
El quicio es un elemento de puertas y ventanas que corresponde a la pieza en la que reside el madero, lámina o espigón donde se fijan los goznes o bisagras y éstas permiten la apertura y el cierre. Si se saca una puerta o una ventana del quicio, éstas, sin ese punto de apoyo, se vendrían abajo, por lo tanto "sacar de quicio" es una forma metafórica de asemejar ese hecho con la exasperación de una persona ante una situación determinada o sacarla de su estado de serenidad. No se conoce a ciencia cierta cual es el momento en el que comenzó dicha asociación, sin embargo ya era empleada en el periodo medieval.
Suche
Es una persona a la cual se le encargan las tareas más pesadas o desagradables. Ser el suche de alguien equivale a ser un sirviente casi al borde de la esclavitud. Los mapuches utilizaban está palabra para referirse a los más jóvenes que eran utilizados como mensajeros. El término viene de suchy, que en quechua es a quien se le encarga una encomienda para entregar a otro.
Se le soltaron las trenzas
Hoy se refiere derechamente a un hombre que se comporta en forma de afeminada o como maricón (gay). Antiguamente la expresión se refiere a quienes liberalizan su comportamiento radicalmente. Por ejemplo alguien muy recatado, que no se va de fiestas y que de un día para otro se convierte en un fiestero de corazón, es alguien a quien se le “soltaron las trenzas”. El concepto nació en el siglo XIX, cuando las mujeres solteras salían a la calle con el pelo tomado o con trenzas. Estas se soltaban después de la noche de bodas, cuando las mujeres perdían su virginidad.
T
Ta Filete o Tafilete
El Tafilete Era el molde interior de un casco que se ajustaba a la cabeza y que servía de amortiguador en caso de golpe. El término, empleado con el tiempo para referirse a lo bien que se sentía llevar este casco de protección, se mantuvo hasta nuestros tiempos separando ambas palabras en ta (está) y filete (bueno, genial). Otro posible origen de esta popular frase sería gracias al corte de carne filete, sin embargo esto ya se decía hace mas de un siglo en las minas de carbón de la zona.
Tengo monos en la cara
Utilizamos este modismo, empleado generalmente como pregunta, al estar molestos cuando alguien se queda mirándonos fijamente. Por ejemplo: "¿Por qué tanto mirarme?, ¿qué pasa?, ¿que tengo monos en la cara?"
El origen de esta expresión, que viene de antiguo, nada tiene que ver con los simios y sí con la palabra "momo". Dice la RAE que "momo" es un "gesto, figura o mofa que se ejecuta regularmente para divertir en juegos, mojigangas y danzas" y es que tal vocablo viene del nombre del dios griego de la burla y el sarcasmo, (además de ser el dios de los escritores y poetas) llamado Μῶμος (Momos). El uso correcto por lo tanto era "tener momos en la cara" pero como tantas otras expresiones, por desconocimiento el pueblo creyó oír la palabra más parecida fonéticamente: "monos", y que a la vez tenía cierto sentido en contexto y con ella se quedó. Finalmente ha llegado así hasta nuestro días con el significado conocido.
Tener sangre azul
Empleamos este modismo para referirnos a alguien de linaje noble o aristocrático. También se suele emplear el término "príncipe azul", procedente del arquetipo de antiguos cuentos infantiles, en el que se describía un modelo masculino idealizado en la figura de salvador de la protagonista. Ejemplo: "Durante la Edad Media, era preciso descender de familia de sangre azul para poder optar al trono".
Una de las principales teorías del origen de la expresión nos lleva al periodo medieval, en el que varios de los trabajos eran manuales y realizados a la intemperie, tales como la labranza, ganadería, etc. Las personas que desarrollaban estas labores estaban más morenas por el sol. La realeza, ajena a dicha exposición, tenía la piel más blanca, y se podían apreciar en ellos las venas con el característico tono azulado a través de la piel, lo cual dio pie a la expresión. Este efecto visual es producto de la manera en la que nosotros percibimos los colores, condicionada por la longitud de onda que influye al reflejar un color. De la misma forma que un prisma, descompone la luz blanca en un abanico de colores en función de dicha longitud de onda, un objeto absorbe todo ese abanico de colores excepto el de la onda que emite, que es el que apreciamos.
En el caso de las venas, la forma en la que la luz incide en la piel en ciertas zonas, hace que el color rojo sea absorbido por éstas, reflejando a su vez la longitud de onda mas corta, basada en tonos azulados.
Diversas enfermedades circulatorias causan cianosis, lo cual potencia este efecto. Con el paso del tiempo esta expresión ha llegado a nuestros días con el significado conocido.
Tocar madera
Empleamos este uso en el momento en el que nombramos un hecho positivo o negativo, para impedir que nos cambie la buena suerte o nos venga la mala respectivamente. Por ejemplo: "Qué viernes más relajado, toco madera para que siga así".
Sea por creencia religiosa, superstición o tradición, la madera ha sido en el transcurso de la historia para diferentes culturas, un sinónimo de buen augurio y proveedora de virtudes. Los celtas, entre otros, con su versión animista de la vida, tenían la creencia que al tocar los árboles entraban en contacto con el alma de estos. Para los cristianos, la madera era el símbolo del origen de la cruz de Jesús. Los griegos e indios norteamericanos, al ver que durante las tormentas eléctricas los rayos solían caer sobre los grandes robles, relacionaron a estos con poderes de los dioses, creyendo que residían en sus vetas. Con el paso de los años se acuñó la expresión como resultado de este tipo de creencias.
Tirar de la manta
Tirar de la manta" significa destapar algún asunto sucio o vergonzoso que se mantenía oculto y que podría resultar comprometedor para alguien. Pero su origen no es tan evidente como puede parecer, ya que la palabra "manta" no se refiere a la prenda que cubre u oculta algo.
Según aparece en la Historia de la Legislación de Marichalar y Manrique (1868), en los siglos XVI y XVII, en algunos lugares de Navarra, se llamaba mantas a unos enormes lienzos colgados en las paredes de las iglesias en los que aparecían escritos los nombres y apellidos de las familias que descendían de judíos convertidos y que habían permanecido en territorio cristiano tras la expulsión de los demás judíos. Y en ese contexto, tirar de la manta significaba investigar posibles falsas conversiones.
Tener buena onda
Sentir simpatía hacia alguien. A primera vista podría creerse que la expresión viene de la contracultura hippie, pero en realidad las "ondas" se refieren a la teoría del magnetismo animal, relacionada con la sugestión y la hipnosis. En la Europa del siglo XVIII el médico austríaco Franz Mesmer alcanzó gran éxito con esa teoría, que postula la existencia de "fluídos" entre las personas. Mesmer hacía "imposición de manos" e hipnosis.
Trucho
Esta palabra se refiere a algo falso o de origen ilegal. El concepto nace en Argentina pero hay varias versiones sobre su génesis. Primero que surgió cuando los políticos de izquierda en los años setenta, en ese país, se cambiaban de identidad. En el país trasandino se usa “trucha”, para referirse al rostro. Entonces cambiar de identidad era como cambiar de “trucha”, lo que después derivó en trucho como algo falso. La otra versión habla de que en los años '80 hubo una crisis ecológica que mataba a las truchas del rio Paraná. Se supone que la muerte de estos peces se debía a la contaminación de empresas que pagaban a funcionarios y encargados de la vigilancia de estas para que no los sancionaran o fiscalizaran. En un programa de radio, el locutor incitaba a estos funcionarios a “dar la trucha” (cara) y sino eran unos “truchos”. Esta expresión se popularizó hasta llegar a nuestro país, por lo que técnicamente no es un chilenismo.
Tirar la casa por la ventana
Se dice que alguien tira la casa por la ventana cuando efectúa gastos extraordinarios con motivo de alguna celebración en particular. Todo comenzó en España, allá por el año 1763, en épocas del reinado de Carlos III (1716-1788), quien instauró la Lotería Nacional en aquel país. Desde entonces, cuando un español obtenía un premio suculento, se impuso la costumbre de arrojar, a veces por la ventana, los muebles y algo más hacia la calle, pues el dinero ganado mediante el azar alcanzaba para reemplazarlos por otros nuevos. Hoy se mantienen la frase y los festejos que ella supone, pero se ha perdido la solidaridad de entregar a otros aquello que resulta útil pero que ya no usamos.
Todos los caminos llevan a Roma
Señala que la solución de un problema se puede encontrar por diferentes caminos. Existen diferentes interpretaciones en cuanto a su origen. Hay quien considera que surge al comienzo del imperio romano en el año 20 a.C. con la colocación por el emperador Augusto del Miliarium Aureum en el Foro. Una gran columna donde se encontraban inscritos los nombres de las principales ciudades de sus provincias y la distancia que había hasta ellas; lo que daba a entender que todos los caminos llevaban a Roma aún desde los sitios más alejados. Otros piensan que viene de la existencia de mapas como la Tabula Peuntingeriana, s.IV d.C., donde se describen las distintas rutas entre Roma y sus colonias. Sobre lo que no existe duda es que en aquellos tiempos Roma era el epicentro del mundo occidental, y como dueña del Imperio era vista como origen y final de todos los caminos entonces existentes. Más tarde, con el establecimiento de la Iglesia Católica y los Papas en Roma se reforzó esa situación como centro de la cristiandad y destino de peregrinaciones y jubileos.
U
Un moco de pavo
Un moco e´ pavo o moco de pavo se refiere a cuando queremos ponderar la importancia de un asunto cualquiera, con frecuencia nos valemos de una comparación negativa y destacamos que eso “no es moco de pavo”. El diccionario define moco de pavocomo “apéndice carnoso eréctil que el pavo tiene sobre el pico”. Pero el dicho del título proviene de cuando se usaba reloj con cadena. Ésta asomaba como una provocación para los ladrones, quienes aprovechaban las aglomeraciones para desprender el reloj y dejar la cadena que lo sujetaba.
Dado el público del que salían los incautos (llamados “pavos” en la jerga del delito), esas cadenas eran de escaso valor, de modo que se quedaban colgando como cuelga el moco del ave. Hoy, se usan relojes de pulsera, la expresión ha perdido toda conexión con su origen.
V
Vale callampa
Se refiere a personas y cosas por las que no se siente ninguna consideración ni estima. Aludiría al escaso valor asignado a ciertas viviendas precarias de las zonas suburbanas, pero otra apunta a los flippers, en cuya parte inferior hay dos "callampas" que cuando las golpea la bola no asignan puntaje.
Valis callampa, (Valer callampa)
Usamos esta expresión para señalar algo sin valor o que es poco apreciado. Una teoría dice que nace del concepto de poblaciones callampa en Chile que son agrupaciones de hogares de material precario y muy ligadas a la pobreza (llamadas así porque aparecen rápidamente como las setas u hongos). Otra versión plantea que la expresión viene de los juegos electrónicos o flipper; en estos hay figuras que parecen callampas y que si son tocadas por las bolitas metálicas no otorgan puntuación, o sea, no valen nada. Finalmente, la más burda es que el término callampa hace referencia al miembro masculino, por su similitud con este.
Vender gato por liebre
Se usa la frase para exponer un engaño típico o una estafa. Durante la Edad Media, en Europa, comenzaron a funcionar ciertas posadas o restaurantes para alojar viajeros. Allí se podía dormir y comer, pero las condiciones no eran de las mejores. A veces, la falta de carne de ternera (o vaca) hacía que se ofrecieran otros platos, aunque no siempre se aclaraba la situación a los clientes. En el peor de los casos, se utilizaba carne de gato (muy similar a la de la liebre).
Vete al carajo
Interjección para expresar un desacuerdo con alguien o cuando le queremos perder de vista. Carajo se le llamaba al lugar situado en lo alto del palo mayor de las antiguas carabelas españolas. Servía como puesto de observación desde el que los vigías oteaban el horizonte en busca de naves enemigas o lugares a donde querían llegar. Cuando un marinero cometía una falta se le mandaba al carajo en señal de castigo, estando obligado a permanecer allí como vigía. Tras apenas un par de horas bajaba totalmente mareado. Un duro castigo que servía para dar escarmiento a quienes cometían alguna infracción a bordo.
Z
Zamba Canuta
Significa decir verdades, por muy fuerte que éstas sean. La expresión proviene de la historia de que una canuta -apodo con el que se denomina a los miembros de grupos evangélicos- de origen zambo, confesaba en público sus más fuertes pecados, ya que su credo así se lo ordenaba.
Para su desgracia, la gente no le ponía atención. Por el contrario, todos comentaban muy impresionados la forma en que este personaje relataba sus intimidades a viva voz.
Zorra
Termino despectivo usado para referirse a la vagina, debido a su mal olor. También usado para referirse a la mujer “fácil” y que es tratada como puta. En minería se identificaba así a la cama y rueda de un cajón carbonero que ya estaba fuera de uso (carro plano).